Sergio Massa no se caracteriza por responder desganado en las entrevistas con periodistas. Conocedor del timing mediático, sabe que un concepto que sorprenda es garantía de repercusión en la esfera pública.
Este lunes por la noche, al dialogar con los medios tras el acto en el que clausuró el primer año de funcionamiento de la Escuela de Gobierno que preside su asesor Roberto Lavagna, Massa eligió sorprender con la cantidad de postulantes que acabará teniendo la primaria del Frente Renovador.
Un cronista le consultó si avalará una interna tan numerosa, con cinco aspirantes (Darío Giustozzi, Mónica López, Gustavo Posse, Felipe Solá y Jesús Cariglino), y respondió: “Creo que vamos a tener más, 6 precandidatos (a gobernador de Buenos Aires)”.
Al preguntarle si se refería a “seis” por la posibilidad del pase del nuevamente intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, contestó fríamente. “Yo no digo nadie en particular, pero creo que pueden llegar a ser 6. Por algunos que se sumen o nuevos interesados que aparezcan”, agregó.
Noticias Urbanas estuvo presente en la improvisada rueda de prensa y consultó sobre las versiones que surgen al interior del massismo bonaerense que indican que el diputado nacional finalmente designará un candidato único en la víspera del cierre de listas, o que cerrará el paso para que la contienda se reduzca a dos.
Entre evasivas y risas, finalmente Massa dijo: “Vamos a llevar varios candidatos a las PASO”. Días pasados, en declaraciones públicas, el intendente interino de Tigre, Julio Zamora, había defendido la posibilidad del candidato único “que interprete las necesidades de los bonaerenses, muchos postulantes no unifican el mensaje”.
Es que por lo bajo, son varios los dirigentes del massismo provincial que arguyen que el variopinto colorido de tener cinco precandidatos a gobernador es contraproducente, y que no hay referentes a nivel municipal o provincial que alcancen para articular tantas listas.
Entre este sector -por ahora minoritario- que prefiere que no haya PASO, la figura de mayor peso es el precandidato y presidente del bloque en Diputados, Darío Giustozzi. Cerca del ex intendente de Almirante Brown dejan trascender que “unas primarias con 4 o 5 candidatos no tienen sentido”, y que “lo ideal sería resolver un candidato único basado en encuestas hechas a último momento, para que tome más fuerza”, aunque cuesta creer que mantengan la misma posición si se termina incorporando al espacio a Insaurralde.
“No va a haber primarias para gobernador. El invento de las internas abiertas es una idealización porteña que no tiene asidero en la Provincia”, suele comentar por lo bajo un senador bonaerense que reside en la zona norte del conurbano.
Desde el otro lado, los precandidatos Felipe Solá, Mónica López y Gustavo Posse siempre se manifestan a favor de las PASO, y fueron quienes más fogonearon para que Massa defina que las listas estén ordenadas y que los postulantes a cargos locales y de la Legislatura no puedan ir en la boleta con cualquier aspirante a gobernador (para que traccionen de abajo hacia arriba en una dirección y no sólo para sí mismos).
Por ahora, el debate no está zanjado, aunque todo parecería indicar que Massa avalará unas primarias porque además de no ser políticamente viable suspenderlas (muchos de sus precandidatos podrían hostilizarse), es también una herramienta que funciona como dique de contención en caso de que Insaurralde llegue. No sólo para abrir el juego sino para marcarle la cancha al lomense.