El mercado arrancó la semana con una fuerte tensión siguiendo la turbulencia por la situación de la deuda en pesos, la caída de los bonos, la fuerte suba de los dólares, y la pronunciada baja de las acciones en la bolsa porteña y los papeles que cotizan en Wall Street.
Este lunes, el riesgo país cruzó los 2.100 puntos, en una jornada negra para los activos argentinos impregnados de desconfianza por varias razones.
Los 2.100 puntos marcaron el actual estado de situación de Argentina. Que este lunes, además, vio cómo la cotización de los dólares – en sus diferentes variantes – subió fuerte hasta cerrar en niveles preocupantes.
Con un agravante: las acciones argentinas se hundieron hasta 12% en Wall Street.
Dólar Blue subió 2,78% y cerró el día a $216,00. La brecha con el Dólar Oficial asciende al 69,3%
Fuente: https://t.co/2VqbbK0ddh— Valor Dólar Blue (@ValorDolarBlue) June 13, 2022
▶ Subió el dólar Blue y los financieros
El dólar blue llegó a 216 pesos en la city porteña marcando un nivel que no tenía desde febrero de este año.
El incremento es de unos 9 pesos promedio. Un valor que lo acerca al precio histórico de 225.
Pero además, también volvieron a subir los dólares en el mercado financiero. El MEP (dólar Bolsa) trepo hasta los 230,61 pesos (un incremento del 3,23% en un solo día) y el Contado con Liquidación a los 236,89 pesos (4,08%).
Analistas financieros y economistas analizaron la fuerte caída de los Bonos que ajustan por CER, la disparada del riesgo país y de los dólares financieros, las posibilidades de un default en pesos y las presiones que esta situación lleva sobre las metas acordadas con el FMI. Una sola acción que despertó a varios gigantes dormidos al mismo tiempo.
La expectativa pesimista de una recesión sacude este lunes a los mercados mundiales tras la publicación el viernes de unas cifras de inflación en EEUU más elevadas de lo previsto. Uno de los factores diferenciales es no solo que la inflación siga sin tocar techo, sino que las expectativas de precios se hayan ampliado y afianzado.
En este contexto, Martín Guzmán deberá desatar un nudo esta semana. Para saber cómo hacerlo, los consultores económicos sostienen que lo mejor que puede intentar es, primero, conocer cómo fue que ese enredo se generó. Recién ahí aumentará la probabilidad de aflojarlo.
Los últimos días tuvieron tanto el Banco Central como a la Anses como compradores donde sólo había ventas. Los títulos ajustados por CER, esos que siguen a la inflación, navegaron las aguas del mercado proa a la recomposición de precios.
El enojo de los bonistas se extiende también al FMI, que se muestra flexible con la Argentina. En la primera revisión se acordó mantener metas anuales pero con modificaciones a la hoja de ruta, aunque el Gobierno no precisó cómo se compensarán los mayores gastos para llegar al déficit de 2,5% del PBI.
Según se conversó en la primera revisión, la baja de subsidios energéticos prevista no sería tal y los economistas calculan que el esquema actual le sumará 0,5% sobre PBI al gasto en subsidios, en línea con lo que habló entre Buenos Aires y Washington, lo que dejaría una reducción sólo de 0,1% para este año.