El expresidente Mauricio Macri se volvió a pronunciar contra el gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela. Esta vez lo acusó de enviar “patotas” a tomar la municipalidad de la ciudad y de tirar basura en ese mismo lugar. Además, le envió su apoyo a la mandataria municipal, Inés Brizuela y Doria.
El nuevo episodio de una escalada de violencia que comenzó antes de las elecciones despertó el repudio de Mauricio Macri.
A través de sus redes sociales, el expresidente manifestó: “Lo que se ve en el video son patotas que responden al gobernador riojano, que tiran basura en la intendencia y quieren entrar por la fuerza, una acción inaceptable que debe ser castigada. Toda mi solidaridad con la intendenta Inés Brizuela y Doria. Respeten la voluntad de las urnas”.
En el video se observa a un camión de basura con la puerta trasera abierta y decenas de bolsas de residuos sobre la vereda, en el ingreso a la municipalidad.
Lo que se ve en el video son patotas que responden al gobernador riojano, que tiran basura en la intendencia y quieren entrar por la fuerza, una acción inaceptable que debe ser castigada. Toda mi solidaridad con la intendenta @ines_byd. Respeten la voluntad de las urnas. pic.twitter.com/cr6PjFo9DL
— Mauricio Macri (@mauriciomacri) November 23, 2021
También se ven forcejeos en la puerta del edificio, entre manifestantes y personal de seguridad que intenta impedir que entren a lugar.
Según relató el viceintendente Guillermo Galván, en diálogo con La Nación, de los 10 vehículos con los que cuenta el municipio, nueve de ellos fueron “secuestrados por gente vinculada a Quintela”.
Además de denunciar la voluntad de este grupo de personas de entrar a la fuerza al palacio municipal, Galván planteó que “muchos de ellos son barrabravas de clubes con los que el gobernador tiene mucha incidencia y que algunos fueron contratados por Quintela durante su gestión en la ciudad de La Rioja, antes de estar a cargo del gobierno provincial”
▶El origen del conflicto
El conflicto comenzó a principios de noviembre, cuando Brizuela y Doria denunció que un grupo de manifestantes quiso violentar el palacio municipal a raíz de la falta de pago de los nuevos 2500 empleados que fueron pasados a planta permanente durante su gestión. La dirigente radical responsabilizó, al igual que Macri, al gobernador Quintela por la falta de personal policial para contener a los manifestantes que provocaron desmanes y le pidió al presidente Alberto Fernández que intervenga.
Además del nuevo intento de toma de la municipalidad, la escalada de disturbios devino, según denunciaron funcionarios de Brizuela y Doria, en una nueva disputa que involucra a los estatales que reclaman sus sueldos pendientes.
Según el gobierno municipal, el inicio del problema nace a partir de una lucha económica por la distribución de los recursos a los diferentes municipios.