Después de que el martes, en la apertura del período legislativo, el presidente Mauricio Macri cuestionara la famosa “herencia recibida”, en la mañana del miércoles se encuentra encabezando una reunión de gabinete ampliado en el predio de Tecnópolis, uno de los sitios emblema del gobierno precedente.
Al cónclave, que comenzó con un desayuno de trabajo a las ocho y media en el predio de Constituyentes y General Paz, asisten la vicepresidente, Gabriela Michetti; el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; el presidente del Senado, Federico Pinedo; el jefe del Gabinete de Ministros, Marcos Peña; los 21 ministros que forman parte del gabinete, los secretarios y los subsecretarios de todos los ministerios.
No existía un objetivo predeterminado para la convocatoria, sino más que nada, según informaron voceros oficiosos, “reunir a la tropa y tender los puentes para que exista coordinación entre las áreas que deberán trabajar en equipo en el futuro”.
Más allá de quiénes serán los oradores, hasta el comienzo de la reunión sólo estaba claro que iba a abrir el evento Marcos Peña y que el cierre estaría a cargo del presidente de la Nación.
Como un dato de color se puede decir que el encuentro se desarrolla en la Nave de las Ciencias, en medio de los rumores que arrecian acerca de la privatización del predio, en el que de ahora en más se daría cabida a las empresas privadas, al contrario de la imprompta kirchnerista, que sólo aceptaba stands de organismos del Estado.
