Finalmente y con el objetivo de cerrar con todo la última caravana del #SíSePuede, el presidente Mauricio Macri le pidió a la Asociación de Fútbol Argentino que adelante la fecha de los partidos de Boca – Racing y de River – Arsenal del sábado al viernes. Tras la decisión de la entidad, se desató la furia de los hinchas de ambos equipos de fútbol.
El primer mandatario viene recorriendo el país en caravana, acompañado de su círculo político para forjar el acercamiento con la gente a lo largo y a lo ancho del país. Y el último acto será en el Obelisco.
El presidente de Boca, Daniel Angelici, fue quien encabezó la negociación con Macri y se determinó que Racing se que enfrentará al club xeneize en la Bombonera un día de semana.
Pero esta decisión no tuvo nada que ver con los tiempos que habían acordado con el plantel por su presidente Víctor Blanco, quien sostuvo que la AFA le dijo que mover la fecha tenía que ver con “darle un día más de descanso a Boca y River para el clásico que pasará al martes 22”. Ambos equipos disputan la Copa Libertadores de América
Ese partido estaba pautado hace varias semanas y los partidos se adelantaron recién este jueves, cuando tomó forma en la Rosada la idea de una pueblada en la 9 de julio en la previa del debate presidencial del domingo 20.
Pero no solo los hinchas de Racing demostraron su enojo, sino que los simpatizantes de Boca Juniors también explotaron en los fotos porque quedaron obligados a asistir un viernes a un clásico con el último campeón, cuando tenían su abono comprado para asistir el sábado y volver al martes para el partido de copa.
El cronograma del sábado de la superliga debió completarse con otro adelante: Independiente y Argentinos Juniors, que se enfrentarán a las 15.30 cuando en el fixture original figuraban el lunes a las 21 horas.