La Ciudad conmemoró el martes el Día Mundial y Nacional de la Concientización sobre el Autismo, en una jornada que buscó generar comprensión, tolerancia y respeto, tanto a quienes lo sufren como a sus familiares.
El Jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y su Vicejefa, Clara Muzzio, propusieron seguir generando acciones que motiven a reflexionar sobre el autismo. Ambos destacaron en la Plaza del Vaticano que el tratamiento oportuno, en los primeros años de vida, permite mejorar el pronóstico y la calidad de vida del niño y también de sus seres queridos.
“Lo primero y lo imprescindible es poner estos temas en la agenda diaria, poder hablar de ellos sin miedo, derribando prejuicios, construyendo puentes con cada una de las diferencias que cada uno de nosotros tenemos. Queremos una Ciudad que abrace a todos”, dijo Macri.
Muzzio, en tanto, agregó: “La diversidad es la norma, no la excepción. Queremos que Buenos Aires sea una ciudad realmente accesible e inclusiva en todas las instancias de la vida de las personas que tienen una discapacidad y también de sus familias. Acompañando desde la educación, desde la accesibilidad y también desde la instancia de poder acceder a un empleo”.
En este sentido la Ciudad trabaja a diario para detectar cada caso a través de: capacitación en los CPI; acciones de visibilización y acompañamiento a organizaciones; entrega de subsidio para financiar asistencia personal; asesoramientos respecto a trámites; registro de Acompañantes Personales No Docentes (APND) para facilitar la búsqueda de profesionales y garantizar la inclusión escolar; bolsa de trabajo; y promoción de la inclusión laboral en el sector privado.
Los trastornos del espectro autista son alteraciones del desarrollo infantil temprano en el que se afectan las áreas de la comunicación, la interacción social y la conducta.
Cada 2 de abril en el mundo se iluminan de azul los edificios emblemáticos en diferentes ciudades. Y Buenos Aires lo hizo en el Obelisco, bajo el lema: “La semana azul”.