La Marche Des Fiertés es la Marcha del Orgullo en Francia, que se celebró el pasado sábado 24 y reunió a miles de personas que caminaron desde la Place de la Concorde hasta République, en la capital francesa.
La marcha pasó por los Jardines de las Tullerías, el Museo del Louvre, la emblemática Rue de Rivoli, Chatelet y otros lugares simbólicos de París. Con varios camiones que aportan música y color a la movilización, hubo un alto en la marcha para hacer 3 minutos de silencio en memoria de las víctimas de VIH sida.
El resto de la marcha se enmarca en una celebración de la diversidad y es acompañada desde los típicos balcones parisinos por saludos, banderas colgadas, papel picado y saludos por doquier. Completan la procesión del sábado medio centenar de personas en lo que es la “quincena del orgullo”.
En las pancartas, de un número mucho menor en comparación a la edición porteña, puede leerse tradicionales “amor libre”, “abrazos gratis”, reclamos como “11 países condenan a muerte y 77 criminalizan la homosexualidad”, o un trencito con familias del colectivo LGBTQ repleto de niños pidiendo “iguales derechos”; o consignas como “Mi cuerpo, mi género, está claro” o “Trans = simplificación del cambio de estado civil”.
En Argentina, en cambio, las últimas marchas han tenido reclamos más radicales: basta de travesticidios y transmicidios, cupo laboral trans, Ley Antidiscriminatoria, educación en la diversidad para crecer en igualdad y varias otras de tinte político y en pos de conquistar más derechos para la igualdad del colectivo LGBTQ.
Ahí hay una diferencia notoria a la vista: Argentina tiene una marcha donde las organizaciones y los partidos políticos hacen presencia y movilizan militantes; mientras que en Francia es un público más alejado de las banderas partidarias, que se acerca a celebrar, bailar, acompañar y darle color a la procesión.
En Paris, la Marcha del Orgullo se celebra, además, con un fuerte control policial para que pueda ser una celebración de la diversidad, en familia, y en masa. Se apostan centenares de policías y el gobierno local realiza controles en cada esquina previa al recorrido de la marcha, que transcurre en un clima colorido y festivo de comienzo a fin.
Fotos: Hasan Öcal y Patrice Gravoin.