La noticia se propagó rápidamente durante el fin de semana en el peronismo de Buenos Aires, provocando un gran revuelo. En medio de la feroz lucha interna que sacude a la principal coalición opositora, surgió una propuesta que podría alterar el panorama político. Un conjunto de intendentes solicitó que Cristina Kirchner lidere la boleta en la Tercera Sección Electoral y que Sergio Massa haga lo propio en la Primera.
Se trata de una maniobra estratégica en los dos distritos más densamente poblados de la provincia de Buenos Aires, donde se desarrollará “la batalla definitiva”. Si bien la solicitud llegó a Massa, el exministro de Economía prefiere designar a Juan Andreotti, el intendente de San Fernando y figura clave del Frente Renovador (FR), para ese cargo.
La posibilidad de que los líderes políticos de dos de los tres sectores fundamentales de Unión por la Patria aumente la presión sobre el grupo que respalda al gobernador Axel Kicillof y a los 40 intendentes que impulsan el conflicto con la presidenta del Partido Justicia Nacional.
Así como los intendentes kirchneristas plantearon la posibilidad de que CFK encabece la lista, los del Frente Renovador (FR) -y también algunos del PJ- plantearon que haga lo mismo Massa. La Primera Sección Electoral elegirá en septiembre ocho senadores, mientras que en la Tercera Sección Electoral se votan 18 diputados provinciales.
El excandidato presidencial les respondió que no estaba en sus planes competir y reiteró que su posición es impulsar a Andreotti, pero no lo descartó por completo.
El rol de los intendentes en el debate es fundamental. Aquellos que apoyan a Cristina y Máximo Kirchner -quien lidera el PJ en Buenos Aires- junto a los 18 del massismo han permanecido cohesivos hasta el momento. Sin embargo, en el equipo de Kicillof han comenzado a observarse algunas señales de división, como lo evidenció Fernando Espinoza, de La Matanza, quien durante el fin de semana mostró actitudes de acercamiento hacia la ex presidenta.