El ministro de Economía, Sergio Massa; junto al Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo; el vicepresidente del BCRA, Lisandro Cleri y el secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren, mantuvieron este martes un importante cónclave con la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes (CASAFE), con quienes dialogaron sobre la necesidad de sumar valor a las producciones agropecuarias argentinas.
Otro de los temas de la conversación fue la importación de productos fitosanitarios que, de no llegar a tiempo, podrían condicionar la próxima cosecha y las exportaciones.
El ministro de Economía, tomó nota del planteo, y ordenó al secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, que se armara una mesa de trabajo para evaluar la situación de cara a 2023, donde se tomarían ésta u otras definiciones.
La idea, así, es generar una especie de salvoconducto o “canal verde” para que las empresas del rubro no sufran restricciones de divisas de parte del Banco Central a la hora de pagar sus importaciones de los principios activos o los fitosanitarios formulados que requieren los productores. En este territorio entran herbicidas, insecticidas y fungicidas, pero también productos biológicos que no se producen en el país y deben ser comprados en el extranjero.
Al término de la reunión, Massa indicó: “La producción agropecuaria es uno de los principales motores de la economía Argentina por su capacidad de generar trabajo y exportaciones, por eso es clave que entre todos trabajemos en medidas que la sigan potenciando y garanticen su crecimiento sostenible e integrado al mundo”.
Junto a @JuanjoBahillo, @DMVasco, Leonardo Madcur y Lisandro Cleri nos reunimos con la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes @TwitCASAFE, con quienes dialogamos sobre la necesidad de sumar valor a las producciones agropecuarias argentinas. pic.twitter.com/6sK0Lzq4LA
— Sergio Massa (@SergioMassa) December 13, 2022
La palabra de los empresarios
El director ejecutivo de la Cámara Argentina de Sanidad Agrícola (Casafe), Federico Landgraf, manifestó: “Fue una buena reunión. Nosotros lo que necesitamos es previsibilidad, porque nuestros clientes son los productores que trabajan con plazos agronómicos y biológicos. De nada sirve una importación de un producto necesario para cuidar el trigo, por ejemplo, si se autoriza cuando ya pasó la campaña de trigo”.
“Le planteamos a Massa y a sus funcionarios que el ecosistema agrícola debería conservar parte de los dólares que se genera para garantizarse el flujo de importación de los insumos que necesita”, agregó.
El empresario agregó que le pidieron al ministro de Economía que “el gobierno argentino está más atento a posibles barreras comerciales generadas por las políticas ambientales de la Unión Europea. El bloque está encaminada a reducir sustancialmente la cantidad de moléculas autorizadas para uso agrícola, y a la vez reduce los niveles de tolerancia de las mismas en los alimentos importados”.
En ese marco, Landgraf explicó: “Como modo de ejemplo, la UE debería discutir en 2023 una prórroga de los permisos al glifosato, el herbicida más popular en la Argentina y en todo el mundo. Si una prohibición surgiera en el viejo continente, luego podrían seguir las restricciones a las cargas de soja y sus derivados”.