Un referente de la barra brava de Rosario Central fue asesinado a tiros el sábado por la noche en la zona sur de Rosario. Se trata de Juan Domingo Maximiliano Ferreyra (45), que era conocido como “Chicha”.
Estaba en su domicilio de Ameghino al 500, cuando un sicario lo llamó por su nombre a través de un ventanal de la cocina que da a la calle, y cuando se acercó, le dio varios disparos en su rostro, pecho y abdomen.
El homicidio de “Chicha” es investigado por el fiscal Luis Schiappa Pietra, quien recibió aviso del caso pasadas las 22 de ese mismo día. Por los datos recolectados en los primeros momentos de la investigación, el asesino se bajó de una moto con un chofer que lo esperó para luego sacarlo de la escena.
El cuerpo de Ferreyra tenía heridas de arma de fuego en el pómulo derecho, en el abdomen y en el tórax. Por orden del fiscal, el cadáver fue trasladado al Instituto Médico Legal de Rosario para la realización de la autopsia. La División de Homicidios de la Policía de Investigaciones incautó su celular, levantó las vainas servidas y relevó las cámaras de videovigilancia de toda la zona, que tenían de manera ilustrativa postes pintados de azul y amarillo en referencia a Rosario Central.
Una de las personas entrevistadas por la Policía fue Juan Carlos Emanuel Ferreyra, alias “Gordo Ema”, el hermano de la víctima, que vive en la planta alta de la casa donde tuvo lugar el ataque, conocido por haber sido condenado en 2004 por haber matado a un nene de 3 años en un ataque que realizó contra una casa de Villa Gobernador Gálvez el 15 de marzo de 2002.
“Gordo Ema” fue muy cercano –investigadores policiales lo sindican como “medio hermano”– de Oscar “Paco Mono” Ferreyra, un ladero de Andrés “Pillín” Bracamonte, el jefe de la barrabrava de Rosario Central, que fue asesinado el 9 de noviembre pasado a pocos metros del Gigante de Arroyito, el estadio del Canalla.
La casa de dos plantas de los hermanos Ferreyra de Ameghino al 500 había sido allanada hace diez años por una causa federal tramitada en la ciudad de San Nicolás, donde se investigaba a quienes proveían drogas a una banda que operaba en esa localidad bonaerense. “Chicha” y “Gordo Ema” cayeron en esos operativos que había realizado Gendarmería Nacional.
Los investigadores policiales sugieren que el móvil del crimen de Juan Domingo Ferreyra ocurrido el sábado podría tener vinculación con ambos hechos, tanto con la venta de drogas al menudeo en la zona sur de Rosario como con el reacomodamiento de la barrabrava canalla, que tiene movimientos desde noviembre pasado, cuando acribillaron a “Pillín”.