El legislador Maximiliano Ferraro considera que la declaración como arrepentido de Claudio Uberti, exfuncionario kirchnerista, es clave para la causa de los cuadernos. “Era el valijero de Julio de Vido. Es importante para seguir desenmascarando el sistema que se había montado en la Argentina”, apunta.
El dirigente de la fuerza que lidera Elisa Carrió, además, considera que el Senado debe avanzar con el desafuero de Cristina Kirchner, acusada de ser jefa de una asociación ilícita, para que la Justicia pueda “trabajar”. “Queda más en evidencia, producto de los cuadernos, que el Senado no puede garantizar impunidad. Esto no inhabilita a que se garantice el debido proceso que tiene todo imputado”, remarca.
También pide que el peronismo “no dilate más” el tratamiento de la ley de extinción de dominio en la Cámara alta para “recuperar los bienes que se fueron por la corrupción”.
El legislador oficialista admite que el escándalo puede impactar en la economía y generar un shock, pero resalta que “esta cuestión ayuda a tener empresarios y funcionarios responsables y a que mejoren los contratos de obra pública, energía y en materia de subsidios”.
–¿Estamos ante un Lava Jato argentino?
–Podemos decir que es una especie de Lava Jato argentino. Esto es lo que Elisa Carrió viene denunciando desde hace tiempo. Primero en 2004 y después en 2008, cuando denunció la asociación ilícita. Había una matriz de corrupción que tenía que ver con obra pública, los subsidios al transporte y la energía.
–¿Le faltan instrumentos a la Justicia para avanzar contra la política como ocurrió en Brasil?
–Pueden faltar instrumentos desde el punto de vista legal, pero el robo es tan escandaloso que la Justicia no puede mirar para otro lado.
–¿Le sorprende la cantidad de confesiones y arrepentimientos? Exfuncionarios y empresarios importantes reconocieron que pagaron coimas.
–No nos sorprendió, porque son los nombres propios y es la matriz que venimos denunciando desde hace más de doce años. La figura del arrepentido sirve, pero no nos sorprende ver los nombres y el modo de funcionamiento que tiene que ver con la obra pública.
–¿Faltan nombres?
–Por supuesto. Más allá de que nosotros siempre hemos apuntado a la connivencia que tuvo la Justicia federal, es importante que los jueces y fiscales actúen de manera independiente y que se investigue lo que sucedió en la Argentina en los doce años de kirchnerismo.
–¿Confía en el juez Claudio Bonadio?
–Ha actuado garantizando la impunidad en otras situaciones, pero creo que acá es muy importante que se pueda respetar el trabajo de la Justicia federal y que de una vez por todas vaya a fondo, no cierre causas o garantice impunidad. Los cuadernos nos muestran los miles y miles de millones que faltan en hospitales y rutas. Es importante que se investigue a fondo y también que el Senado no dilate más la ley para recuperar los bienes que se fueron por la corrupción.
–¿La declaración de Claudio Uberti como arrepentido es clave?
–Uberti era el gran valijero de Julio de Vido. Su declaración es importante para seguir desenmascarando el sistema que se había montado en la Argentina.
–¿Se rompió un dique con las confesiones?
–Creo que muchos de los que están eligiendo la figura del arrepentido y aportan datos, lo hacen atentos a que la pena no sea mayor a la que tendrían.
–¿Al PJ se le va a hacer difícil sostener la protección a Cristina?
–El Senado tiene que actuar conforme a como se actuó en otros desafueros, para que la Justicia pueda trabajar. Queda más en evidencia, producto de los cuadernos, que el Senado no puede garantizar impunidad. Esto no inhabilita a que se garantice el debido proceso que tiene todo imputado.
–¿Cristina Kirchner puede ir presa por esta causa?
–Es una cuestión que deciden el fiscal y el propio juez. La Justicia no puede mirar para otro lado.
–¿Qué impacto puede tener el escándalo en la economía?
–Puede generar algún tipo de movimiento, pero creo que en definitiva esto ayuda a que en el futuro haya mejores inversiones y reglas de juego claras, que no existieron durante el kirchnerismo. Es cierto que puede generar shock, pero esta cuestión ayuda a tener empresarios y funcionarios responsables y a que mejoren los contratos de obra pública, energía y en materia de subsidios.
–¿La Justicia está ante una oportunidad histórica?
–Es una oportunidad para cambiar las cosas de verdad.
–¿Qué influencia puede tener el caso en las elecciones de 2019?
–Estamos a un año de las elecciones, no me gustaría adelantar votos que pueden expresar las encuestas.
–¿Qué representa la conformación de Cambiemos en la Ciudad?
–Es un paso importante, que apoya la estrategia nacional de Cambiemos y parte también de la estrategia que establecimos con Larreta y Carrió. Será una construcción diaria de confianza.
–¿Qué percibió en el último timbreo? ¿Hay descontento por la situación económica?
–Me tocó recorrer Liniers y estuvieron muy presentes varias cuestiones vinculadas con la Ciudad y con el ordenamiento del espacio público. A su vez, había una mezcla de preocupación por la situación económica, con expectativa de cambio. La posibilidad de cambio sigue presente y no le pertenece a un presidente.
En primer plano
• Un proyecto de ley. Formación docente y UniCABA y el proyecto de ley para promover y garantizar derechos en el ámbito laboral para las personas transexual travesti.
• Un lugar en la Ciudad. San Telmo.
• Una serie. El marginal.
• Un libro. El salto de papá, de Martín Sivak.