La pulseada de la cúpula del PRO con Gabriela Michetti, que pretendía que fuera candidata a vicepresidente en la fórmula de Mauricio Macri, tuvo finalmente como ganadora a la senadora nacional, quien buscaba su oportunidad en la Ciudad. Zanjada este viernes esta breve “crisis” del macrismo, llegó el momento de los paños fríos y del comportamiento políticamente correcto. En su primera aparición mediática tras definirse el conflicto interno, Horacio Rodríguez Larreta destacó como un “gesto de madurez y que muestra el crecimiento del PRO” la decisión del partido amarillo de que en las PASO disputen varios precandidatos propios para jefe de Gobierno porteño.
“Se viene la interna con (Gabriela) Michetti, (Christian) Ritondo, con (Diego) Santilli, somos varios”, dijo el jefe de Gabinete porteño, al referirse a los candidatos que tiene el macrismo en la Ciudad. De acuerdo a las encuestas, Michetti es la que más posibilidades tiene para llevarse una victoria en las elecciones para jefe de Gobierno porteño.
Pese a esta mayor intención de voto de la dirigente macrista, Rodríguez Larreta dijo que se ve con fuertes posibilidades en los en los comicios. “La gente valora el trabajo que venimos haciendo con Mauricio (Macri) y con el equipo”, afirmó. Y agregó: “Me veo muy bien. Yo llevo siete años trabajando” en la Ciudad.
“Siento el apoyo de Mauricio y de la gente que ve en la calle lo que estamos haciendo”, insistió en diálogo con radio Mitre el precandidato a jefe de Gobierno.
Este viernes, Gabriela Michetti celebró el aval Macri y de la mesa chica del PRO a su postulación en la elecciones del 26 de abril. “Un sano, productivo y amplio intercambio de ideas nos llevó a tomar la decisión de participar en las PASO de la Ciudad de Buenos Aires”, sostuvo a través de un comunicado de prensa.