En un debate organizado en la Universidad de San Andrés, del que participaron referentes partidarios de la oposición, emergieron ideas tendientes a combatir la lucha contra las drogas. La principal: el pedido de creación de una agencia federal que se encargue de dar lucha al flagelo.
El ministro de Seguridad de la Ciudad, Guillermo Montenegro se manifestó a favor de crear una agencia contra el crimen organizado, que trabaje separada de la policía y reúna a los especialistas más destacados en la materia. Estimó, además, que su conducción debería estar en manos de una persona cuyo mandato no coincida con los tiempos presidenciables, de modo que no esté atado a los avatares de un gobierno, y que no sea posible ser reelecto.
Asimismo, remarcó la dificultad de coordinar políticas a nivel mundial porque “el país está aislado”. Llamó a mejorar la inversión en el área y a tomar las experiencias que han tenido éxito en otras naciones, entre las que destacó el trabajo de la DEA y el FBI de los Estados Unidos.
Con matices, la propuesta de Montenegro fue compartida por los otros panelistas, que enfatizaron la imposibilidad de instrumentar medidas adecuadas sin que un organismo reúna y sistematice la información sobre el tema.
A su turno, Francisco De Narváez afirmó que “sin una decisión política unánime perdemos el partido todos los días”, indicó De Narváez. El diputado sostuvo que la estrategia de la lucha contra el flagelo debe surgir desde el gobierno nacional, aunque subrayó que se tiene que involucrar a todos los estamentos del país en sus tres niveles de poder. “Nadie que ocupe un cargo público se puede sentir ajeno“, dijo.
También participaron los diputados Ramiro Gutiérrez y Gerardo Milman.
Los dirigentes pidieron proteger mejor las fronteras –hablaron de radarización y la posibilidad de sancionar una ley de derribo-, capacitar a las fuerzas de seguridad, dotar de herramientas al Poder Judicial y apuntalar la prevención, principalmente desde los ámbitos educativos.