El ministro de Justicia y Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, hablando del tráfico de estupefacientes y las responsabilidades de su
comercialización, dijo que la Argentina dejó de ser “un país de tránsito, está claro que se está produciendo en el país, dejamos de ser un país de tránsito y transporte para ser un país de producción y consumo”.
Montenegro, un partidario de la mano dura, expresó además que “no estoy de acuerdo con la despenalización de la marihuana, Brasil lo hizo y no le salió bien. Una persona adicta es un enfermo y al que probó (la droga) hay que informarlo sobre las consecuencias”.
De todos modos, el ministro extendió las culpas del accionar de los policías ligados al narcotráfico más allá de los propios agentes traidores. “No justifico al policía, porque asumió el rol de ser policía a pesar de estar mal pago, pero la responsabilidad de muchas cosas es de las políticas”.
Opinando en la polémica sobre la baja de la edad de imputabilidad, el ministro macrista se mostró proclive a que “hay que hacer una modificación del régimen penal juvenil. Es como que uno lo quiere meter en la campaña porque es problema de la gente. Nosotros tenemos que compararnos con problemáticas similares. El bien y el mal se diferencian a los 14 años, el tipo que está en el delito es problema del Estado”.
No eludió tampoco el ministro referirse a la designación del ex intendente de Ezeiza, Alejandro Granados, al frente del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires. “El trabajo que hizo en Ezeiza lo conozco desde hace más de 15 años -relató-, hizo mejoras en la policía, impuso las cuadrículas, eso funcionó y lo laburó”.
Con respecto al marco político de la gestión en seguridad, Montenegro dijo que “con él está garantizada la relación con los intendentes y la capacidad de trabajo, tenemos que juntarnos con él y con Sergio Berni. Estoy de acuerdo también con la división entre Justicia y Seguridad en
la provincia de Buenos Aires”.
En el marco de la conducción de las fuerzas policiales, Montenegro se mostró partidario de que “la fuerza tiene que estar a cargo de un policía porque el policía estudió 40 años, pero el ministerio tiene que estar a cargo de un político. Ahora, si yo tomo decisiones operativas, me equivoco seguro”.
