El Comité Nacional logró una lista de unidad que llevó a la presidencia a Gerardo Morales y ahora, con esa interna resulta, el jujeño busca avanzar en su disputa de poder con el Pro dentro de Juntos por el Cambio.
Algunos dirigentes de la UCR comenzaron a sostener: “No se puede estar unidos acá -en el Comité Nacional- y separados en la Cámara. Hay que trabajar para que la unidad forma parte del acuerdo”.
En ese contexto, el acuerdo implicaría trabajar en la unión de la bancada con fecha límite el 1 de marzo, que es cuando empiezan las sesiones ordinarias. Pero el entendimiento trae algunos otros acuerdos internos y que buscan resolver el motivo de la fractura: el liderazgo.
En contacto con Infobae, Gerardo Morales dijo que trabajará para unir al bloque con la condición de que Mario Negri se mantenga como el presidente. El problema es que esa continuidad fue la que generó el quiebre con el sector de Evolución que comanda Lousteau.
La novedad con la que cuenta el Gobernador de Jujuy, es que Negri ya avisó que no está interesado en mantener ese cargo -fue el último presidente del interbloque- y que se quiere quedar como el jefe del bloque. En esas idas y vueltas, surgió con fuerza que la propuesta radical sea el representante de Evolución, Rodrigo de Loredo, lo que terminaría con las diferencias con el sector de Lousteau.
Pero, lo que parecía encaminado, encontró resistencia en el Pro y en la Coalición Cívica que tampoco miran con agrado que se utilice la presidencia del interbloque como prenda de la interna radical.
Una fuente del bloque del partido de Lilita Carrió le dijo a Infobae que “a nosotros nadie nos dijo nada y el interbloque no está para solucionar la interna radical. Nosotros acordamos decidir esto para marzo y no veo que se pueda adelantar”,
Aunque el plazo es marzo y los bloques más importantes de Juntos por el Cambio acordaron no tomar ninguna resolución hasta esa fecha, la discusión plantea la primera pelea frente a frente entre Morales y el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta mirando el 2023.
Los dos quieren la cabeza de la fórmula que va a disputar la presidencia en 2023 y saben que buena parte de la discusión política pasará por el Congreso de la Nación.