“Creo que el futuro de Juntos por el Cambio (JxC) en la Ciudad depende mucho de fortalecer la coalición, de escuchar la pluralidad de voces para tener la mejor gestión de gobierno posible y que los porteños nos sigan eligiendo”, le aseguró a Noticias Urbanas la titular de la Subsecretaria de Gobierno Abierto de la Legislatura porteña, Natalia Fidel.
Fidel fue hasta el 10 de diciembre y durante ocho años, legisladora por Confianza Pública y en un reportaje con NU habló de la política porteño, de JxC, del gobierno de Javier Milei y de Jorge Macri, entre otros temas.
Sobre el gobierno libertario, dejó una reflexión, que también es un llamado de atención. “Ahora llegó el momento de la verdad, de demostrar gestión y si tiene un plan para reactivar la economía y disminuir el desempleo. La pobreza es ahora la principal preocupación de la gente y creo, honestamente, que a futuro su gobierno no será evaluado por el control de las variables macroeconómicas (cero emisión, cepo, baja de impuestos) sino por el impacto que tuvo ese plan económico propuesto a la hora de mejorar la calidad de vida de los argentinos, en particular los más desprotegidos como los niños y los adultos mayores”, le manifestó a este medio.
Tampoco esquivo hablar de la interna que vive el Pro a nivel nacional. “Estamos transitando un cambio de época. En el Pro hay matices sobre cómo posicionarse frente a este cambio de contexto. Yo creo que representa una oportunidad para todos, incluso para los partidos que conformamos parte de Juntos por el Cambio, para repensarnos y redefinir los liderazgos en función a los valores que queremos representar”, señaló.
-¿Cuáles son los objetivos de la gestión de la Subsecretaría de Gobierno Abierto?
La misión de la Subsecretaría de Gobierno Abierto es hacer de la Legislatura porteña un Parlamento más transparente y accesible, donde se promueve la participación ciudadana y la colaboración en la búsqueda de soluciones a los problemas públicos. Su principal objetivo es elaborar y ejecutar un Plan de Legislatura Abierta, co-creado con organizaciones de la Sociedad Civil, para definir acciones concretas y medibles que cumplan con ese propósito.
Además, formamos parte de la Mesa de Estado Abierto, junto a referentes del Poder Ejecutivo y Poder Judicial, donde trabajamos en el IV Plan de Acción de Gobierno Abierto de OGP -Open Government Partnership- donde se definen compromisos e hitos que hacen a la coordinación de políticas públicas innovadoras, cuyo fin último es mejorar la calidad de los servicios públicos de la Ciudad. Además formamos parte de una Red de Legislaturas Abiertas donde compartimos experiencias y buenas prácticas con otras Legislaturas provinciales y Concejos Deliberantes municipales.
La Ciudad Autónoma de Buenos Aires fue pionera en materia de transparencia con la sanción en 1998 de la ley 104 de acceso a la información pública, que luego reformamos y fortalecimos en el 2016 con el plan de transparencia activa, la creación de autoridades de aplicación y órganos garantes, así como hicimos el año pasado actualizando la Ley 6 de audiencias públicas. Creemos en la innovación pública como un proceso evolutivo constante y el rol de la Subsecretaría de Gobierno Abierto es promover esa apertura y cambio a través de múltiples herramientas como el Portal de datos abiertos, el Portal de diálogo legislativo, el formulario digital para solicitudes de acceso a la información pública, la Oficina de Atención Ciudadana, el digesto de Gobierno Abierto y capacitaciones, entre varios otros programas.
-¿Cómo influyen estos temas en los porteños?
La agenda de Gobierno Abierto contribuye a una gobernanza más transparente, participativa, y colaborativa; y sus beneficios impactan en el fortalecimiento de la democracia y la mejora de la gestión pública. El fin último es mejorar la vida de las personas a través de políticas públicas más eficientes, eficaces y sostenibles.
Se trata de fortalecer las instituciones democráticas y los procesos de toma de decisiones públicas para que se traduzcan en una mejor calidad de servicios públicos. ¿Cómo? Fomentando la apertura de datos e información, que permitan una mayor participación ciudadana y co-creación de soluciones a los problemas públicos. Una manera simple de verlo es a nivel local o de comuna, cuando le preguntas a los porteños sobre los temas de su barrio, nadie mejor que ellos para saber lo que funciona y lo que falta mejorar. El objetivo es sumar esas voces al proceso de mejora continua de gestión de lo público, haciendo el mejor uso de las tecnologías de información y comunicación, y tomando decisiones basadas en evidencia.
-La Legislatura aprobó este año un proyecto que usted impulsó sobre la creación del Instituto de Estadística y Censos de la Ciudad, ¿qué nos puede decir sobre esto?
Creo que es un paso importante en la dirección que te acabo de mencionar. En la construcción de un Estado más inteligente, cuyas decisiones ayuden a reconstruir la confianza con la ciudadanía. La Ley Marco de Producción Estadística es un paso hacia el fortalecimiento institucional y del Gobierno Abierto en la Ciudad porque viene a aggiornar una ordenanza de 1979 que ya estaba obsoleta. Como digo siempre: lo que no se mide, no se alcanza. Y con esta Ley lo que hicimos fue mejorar los estándares de calidad, producción y publicación de los datos públicos de la Ciudad. ¿Para qué sirve tener datos públicos de calidad? Para poder abordar mejor el ciclo de políticas públicas, desde la definición de los problemas, el diseño de soluciones que aborden su multidimensionalidad, a implementarlas correctamente y evaluar su impacto. Se trata de tener mejores soluciones a los problemas públicos. La creación de un Instituto de Estadísticas y Censos de la Ciudad autónomo y autárquico jerarquiza y convierte al Sistema Estadístico de la Ciudad en una política de Estado innovadora sujeta a estándares internacionales.
En los ocho años que fui legisladora trabajé mucho para fortalecer las políticas públicas basadas en evidencia, como lo fue el Sistema Integrado de Información y Estadística Criminal que se incorporó a la Ley Integral de Seguridad en 2016, el Sistema de indicadores de Género sancionada por unanimidad en 2017 al igual que la Encuesta del Uso del Tiempo durante la pandemia. Que esta ley también haya salido por unanimidad habla de la calidad institucional que estamos creando. El siguiente paso es trabajar en la protección de los datos personales para modernizar nuestra legislación a los estándares fijados por la Unión Europea y cuidar los datos de NNyA entre muchos otros beneficios.
-¿Cómo ve el futuro de JxC en la Ciudad?
Que los porteños nos hayan elegido por quinto mandato consecutivo para gobernar la Ciudad de Buenos Aires representa una enorme responsabilidad. Y eso fue posible gracias a la coalición de partidos que es Juntos por el Cambio integrada por el Pro, el radicalismo, Confianza Pública, la Coalición Cívica, Republicanos Unidos y el socialismo.
A nivel nacional los argentinos nos eligieron para ser una oposición constructiva. El equilibrio entre estos dos roles es clave.
Juntos por el Cambio nació como un espacio que tenía el valor central y nuclear del respeto en la diversidad, y de la inclusión de diferentes puntos de vista y miradas bajo la convicción de que escucharnos entre los que tenemos los mismos valores, pero podemos tener diferencias en la mirada, nos enriquece a todos. Creo que el futuro de JxC en la Ciudad depende mucho de fortalecer la coalición, de escuchar la pluralidad de voces para tener la mejor gestión de gobierno posible y que los porteños nos sigan eligiendo.
-¿Cómo ve la gestión de Jorge Macri en la Ciudad?
Me parece muy importante que haya podido recuperar los fondos de coparticipación que nos había sacado la Nación, y que a partir de agosto se cumpla con la medida cautelar de la Corte Suprema que establece que la Ciudad debe recibir el 2,95% del total de recursos coparticipables. Esto representa 80.000 millones de pesos por mes que la Ciudad había dejado de percibir, y en el contexto actual es muy valioso que se haya recuperado para los porteños.
-¿Cómo ve la nueva composición de la Legislatura?
La Legislatura actual me recuerda un poco a la Legislatura a la que yo ingresé por primera vez, en diciembre de 2015, donde ningún bloque tiene más del 30% de la representatividad. Esto requiere de mayor esfuerzo de debate y articulación entre las distintas fuerzas políticas, que me parece un ejercicio muy sano en un organismo legislativo lo que en definitiva redunda en mejores políticas públicas y equilibrios más duraderos ya que son fruto de la construcción de consensos más profundos.
-¿Cómo analiza al Gobierno de Javier Milei en lo político y en lo económico?
Creo que en sus primeros meses el nuevo gobierno tuvo el apoyo popular para cumplir con algunos de los objetivos que se propuso en campaña como controlar la inflación y el déficit. Logró, finalmente, desde lo político sancionar la Ley Bases y el paquete fiscal; y firmar el Pacto de Mayo el 9 de julio. Ahora llegó el momento de la verdad, de demostrar gestión y si tiene un plan para reactivar la economía y disminuir el desempleo. La pobreza es ahora la principal preocupación de la gente y creo, honestamente, que a futuro su gobierno no será evaluado por el control de las variables macroeconómicas (cero emisión, cepo, baja de impuestos) sino por el impacto que tuvo ese plan económico propuesto a la hora de mejorar la calidad de vida de los argentinos, en particular los más desprotegidos como los niños y los adultos mayores.
Hoy veo a un Gobierno que cierra un primer semestre consiguiendo las herramientas que había pedido para gobernar, y que comienza el segundo sin más alternativa que gestionar y empezar a concretar resultados que produzcan la reactivación económica. El principal problema que va a tener el Gobierno es pasar de la teoría a la práctica, y consolidar un equipo de gestión que resuelva los problemas urgentes e importantes que tenemos los argentinos.
-¿Cómo ve la interna del Pro?
Estamos transitando un cambio de época. Vivimos en un contexto de crisis de representación de la gente, que siente que la clase política le falló una y otra vez, y esa emoción es en definitiva el principal motor detrás de la llegada de Milei al poder. La política sabe que esto es así, y los actores y organizaciones que la componen están reaccionando a estos cambios de paradigma y en muchos casos a la noticia de su propio fracaso.
En el Pro hay matices sobre cómo posicionarse frente a este cambio de contexto. Yo creo que representa una oportunidad para todos, incluso para los partidos que conformamos parte de Juntos por el Cambio, para repensarnos y redefinir los liderazgos en función a los valores que queremos representar.
-¿Qué opina de una posible alianza entre el Pro o Juntos por el Cambio con La Libertad Avanza?
Creo que es muy prematuro hablar de la posibilidad de cualquier tipo de alianzas. Eso deberá definirse dentro de cada partido y coalición. Creo que en este momento, lo más importante es concentrarse en la gestión y darle soluciones a los problemas de la gente.
