Natala Fidel es legisladora de Confianza Pública dentro del bloque oficialista de Vamos Juntos. En un reportaje con Noticias Urbanas adelantó los temas que impulsará en la Legislatura en colaboración con sus compañeros de bloques, entre los cuales se destacan cambios en la ley de ética pública que tendrán que ver con las empresas que realicen obras en la Ciudad. Además, se impulsará una Oficina Anticorrupción y un proyecto de financiamiento de los partidos políticos. “La Ciudad tiene una ley de ética pública pero así como en su momento mejoramos la ley de acceso a la información con una oficina de acceso a la información, nosotros lo que necesitamos es una autoridad de aplicación para que la ley de ética pública en la Ciudad sea efectiva”, explicó.
La legisladora también habló sobre el funcionamiento interno del bloque oficialista, la campaña electoral, las posibilidades electorales de Vamos Juntos y la reelecciónn del jefe de Gobierno de la Cidad, Horacio Rodríguez Larreta. Por otro lado, dejó una definición sobre la conformación de Cambiemos en la Ciudad y la posibilidad de sumar a Martín Lousteau: “Una fuerza más enriquecería a Vamos Juntos”, aseguró.
-En el 2018, la Legislatura aprobó más de cien leyes y se sancionaron todos los códigos que quería el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta. Como integrante del bloque oficialista de Vamos Juntos, ¿qué balance hace del año?
-El 2018 fue un año histórico en términos de la importancia de las leyes que sancionamos en la Legislatura, que fueron 189. Y no solo hay que marcar la cantidad, sino más bien la calidad o envergadura ya que se votaron seis códigos que hacen a la planificación de la Ciudad a futuro. Hay códigos que hacen a la convivencia de los porteños como es el Código Urbanístico o de Edificación, Habilitación o Procesal Penal, Contravencional y uno nuevo que es el Electoral. Así que fue un año muy productivo en el que pudimos debatir la Ciudad que queremos para los próximos 50 años.
-Esto tiene relación con las obras que lleva adelante el Gobierno porteño como es el caso del Paseo del Bajo.
-Totalmente. Paralelamente a que en el Ejecutivo se están haciendo grandes obras y que los vecinos lo ven, como puede ser el Paseo del Bajo o los viaductos que se elevan en San Martín, Mitre y Belgrano Sur y todos los paso a niveles que se elevan para evitar accidentes de tránsito, tienen el correlato aquí en la Legislatura de que lo que trabajamos es en la normativa para acompañar todo ese cambio de una Ciudad que se repiensa constantemente de cara al futuro y viendo cuáles son las herramientas que tenemos y cuáles del pasado habría que aggionar. Por ejemplo, en el caso del Código Contravencional se le agrega un enfoque de género y se solucionaron problemas que no estaban cubiertos en el pasado como pueden ser los trapitos y cuidacoches que no tienen autorización en la vía pública. Es un proceso de dos caras que mientras que a nivel del Ejecutivo se realizan grandes obras de infraestructura, la Legislatura lo acompaña con un marco normativo que planifica la Ciudad del futuro.
-¿Qué proyectos legislativos está preparando para este año?
-En el 2018 sancionamos un Código Electoral con amplio consenso, con 49 votos, que es lo que define las reglas de juego en un año electoral o lo que se llama la gobernancia electoral. Lo que quedó pendiente de esa discusión porque no alcanzamos los consensos fue el tema del financiamiento partidario o cómo se financia la política, que creo que es una deuda que tenemos pendiente de cara a la sociedad y de ahí hay dos modelos antagónicos: si se acepta el financiamiento de las empresas o no.
Los que no lo quieren aceptar es porque dicen que cuando las empresas ponen dinero en la política ponen también una exigencia o piden una contrapartida. Los que sí queremos que se regule queremos tener la trazabilidad del dinero en la política y entender de dónde viene para después hacer un seguimiento de que después eso no se devuelva en favores políticos.
Hay otro proyecto que también falta discutir que es el paquete de integridad. La Ciudad tiene una ley de ética pública pero así como en su momento mejoramos la ley de acceso a la información con una oficina de acceso a la información, nosotros lo que necesitamos es una autoridad de aplicación para que la ley de ética pública en la Ciudad sea efectiva. Ésta tiene que ver con que las obras se realicen en tiempo y forma y que las empresas tengan un oficial adentro que haga respetar las normas anti corrupción o de lavado, tanto en obra pública como en las compras y contrataciones como una oficina que sea proactiva en el seguimiento de las declaraciones juradas de los funcionarios.
-¿Esto cambiaría la ley actual que regula las contrataciones de obra pública en la Ciudad?
-Sí, en realidad, dentro del paquete hay distintos proyectos. Yo tengo uno de Oficina Anticorrupción, que tiene que ver con la transparencia en el uso de los fondos públicos, pero hay de otros diputados. Hay unos que aggionarnan las leyes tanto de compras y contrataciones como de seguimiento de la obra pública.
Y hay un tercer punto que es bastante nuevo, ya que el año pasado hubo una agenda de género bastante activa en términos de licencias por paternidad y distintos proyectos que fueron sancionados. Y lo que propuse fue un Presupuesto con enfoque de género para empezar a tener indicadores sobre cómo asignamos el gasto público para acortar la brecha. Hay una tendencia para que cuanto más corta sea la brecha en el mercado laboral, más será el crecimiento en una ciudad o un país.
Así que estos son los tres proyectos, entre otros, en los que voy a seguir trabajando.
-¿Cómo ve las posibilidad de Vamos Juntos en la Ciudad, teniendo en cuenta que se pone en juego la reelección de Larreta?
-Yo siempre digo que una elección es una oportunidad para uno poner sobre la mesa y contar lo que está haciendo y escuchar a la ciudadanía para ver qué hace falta y ésta entonces le diga si le renueva el voto de confianza o no. En ese sentido, creo que los porteños ven que la Ciudad de Buenos Aires es una ciudad en movimiento y que se está transformando constantemente. Así que veo con muy buenas perspectivas la posibilidad de que Horacio renueve su mandato. Me parece una oportunidad para seguir con las transformaciones profundas que mencionaba anteriormente.
-¿Cómo ve el rol de Confianza Pública y de la Coalición Cívica, dentro de Vamos Juntos, con relación a la elección?, ¿Confianza Pública pedirá algún lugar en particular?
-La experiencia del 2018 de funcionar como un interbloque viene porque somos distintos espacios políticos que aportamos nuestros matices para la discusión política, y en ese sentido el 2018 fue muy enriquecedor porque teníamos estas distintas visiones en las discusiones políticas de fondo para discutir estos seis códigos. Venimos de una buena experiencia de ejercer esa unidad y diversidad.
De cara al futuro me imagino seguir haciendo lo mismo, aportando nuestra visión. Tenemos una mirada de trabajar para acortar las brechas entre el norte y el sur de la Ciudad. El sur está bien, está trabajando y avanzando pero todavía hay trabajo para hacer en términos de achicar las inequidades entre ambas partes.
En un año hay doce meses, y en un año electoral la campaña empieza apenas unos meses antes de la elección, así que legislativamente vamos a seguir redoblando la apuesta para seguir transformando la Ciudad. Y en el año electoral aportaremos desde el lugar que nos compete, en el sentido de que nosotros queremos que Horacio gane en primera vuelta. Creemos también que Santilli es un excelente vicejefe y, todavía falta mucho tiempo, veremos cómo se acomodan los jugadores en la cancha. Pero el objetivo sigue siendo trabajar en las transformaciones profundas y dando nuestra visión para que el diagnóstico y la solución sean más ricas.
-¿Qué es lo que le gustaría hacer como política, dado que este año debería renovar su banca como legisladora?
-Yo vengo de otro lugar, y el espacio legislativo me sorprendió para bien. Descubrí como una nueva pasión, estoy muy contenta haciendo lo que hago. Tuve la oportunidad de discutir 189 leyes en un año y seis códigos que hacen a la convivencia de los porteños. Así que poder aportar a esa discusión a mí me enorgullece y enriquece en lo profesional y personal. Me encantaría seguir trabajando desde lo legislativo para seguir planificando la Ciudad del futuro.
-¿Cómo ve la posibilidad de que se conforme Cambiemos en la Ciudad?
-De la mano de lo que acabo de decir, me parece que siempre la diversidad enriquece por definición. Me parece que ya hubo un primer acuerdo con Martín Lousteau y el radicalismo para conformar Cambiemos en la Ciudad. A mí me parece que un actor más dentro de la coalición de Gobierno siempre enriquece porque es una mirada nueva y un diagnóstico nuevo. Lo que falta es terminar de definir los acuerdos programáticos pero, personalmente, creo que es súper enriquecedor que se termine de integrar una fuerza más dentro de la coalición de gobierno para seguir dando los debates internos que hagan falta.