Nicolás Trotta, rector de la UMET y coordinador de los equipos técnicos del Frente de Todos, en diálogo con NU, asegura que la prioridad del futuro gobierno debe ser la implementación de “las políticas necesarias para detener el crecimiento de la pobreza y el hambre”. Entiende que el Fondo Monetario Internacional (FMI) es corresponsable de la crisis y afirmó que Fernández no sabe con qué país se va a encontrar, a causa de la inestabilidad de la economía.
-¿Cuál debería ser la prioridad de un eventual gobierno de Alberto Fernández: la renegociación con el FMI o la situación social?
-Es muy difícil saber con qué Argentina se encontrará el futuro gobierno. Dada la enorme inestabilidad que transita el país por las malas decisiones que ha tomado el gobierno de Macri desde un comienzo, el futuro gobierno no tiene una cartografía desarrollada porque no sabe con qué Argentina se va a encontrar. De todos modos, sin lugar a dudas, uno tiene la certeza de que la prioridad del futuro gobierno sería detener la caída social que estamos transitando y desplegar las políticas necesarias para detener el crecimiento de la pobreza y el hambre.
-Fueron muy duros con el FMI al decir que son corresponsables de la crisis. ¿Eso puede complicar la negociación?
-Lo venimos sosteniendo hace tiempo. En la última reunión de Alberto con el Fondo, sostuvo que hay una responsabilidad del gobierno de Macri, pero también una marcada corresponsabilidad e irresponsabilidad del FMI, a partir no sólo del diseño de las políticas de ajuste, sino del brutal proceso de endeudamiento. Esto se afianzó a partir del acuerdo que implicó la transferencia de 45 mil millones de dólares, que sirvieron sólo para sostener la especulación y la fuga de capitales.
-¿Esperan que el Gobierno abra un diálogo con Fernández sobre el presupuesto del año próximo?
-Debe haber un diálogo en el Congreso nacional, adonde está la representatividad de todas las fuerzas políticas. El proyecto lo presenta el Ejecutivo, pero lo termina sancionando el Congreso. Hasta el 27 de octubre, la responsabilidad de llevar adelante el gobierno y administrar esta profunda crisis que generaron es de Macri y su gabinete. Después de que esté consagrada la fórmula el 27 de octubre, como en toda democracia, se abre un proceso de transición ordenada entre la fuerza política derrotada y la ganadora, que va a asumir la conducción del Estado argentino.
-¿Cuál es la postura del Frente de Todos respecto del proyecto de emergencia alimentaria?
-Nuestro espacio viene manifestando la necesidad de implementar todas las políticas necesarias para enfrentar la crisis en la que estamos. Nada de lo que haga el gobierno nacional es suficiente frente a lo que es el marcado crecimiento de la pobreza. Uno de los ejes centrales no solo es el proceso de articulación con los movimientos sociales y la Iglesia, sino también una fuerte articulación con las provincias y municipios para hacer frente a esta situación social acuciante.
-¿Hubiesen preferido que el Gobierno lo hiciera por decreto?
-Estamos perdiendo semanas clave en una discusión sin sentido. Si hay una necesidad urgente, tiene que haber una respuesta política pública. Hace tres semanas que venimos discutiendo si la normativa está vigente o no, me parece una discusión sin sentido, en una situación dramática.
-¿Los encuentros de Alberto Fernández con la UIA y CGT son un ensayo de pacto social?
-Alberto Fernández viene dialogando con los distintos sectores productivos y del trabajo desde hace tiempo. Y hay algunos que acompañaron nuestra fórmula, como la CGT o la CTA. También se ha reunido con actores del sector productivo y de la Mesa de Enlace. En todos los encuentros termina desplegando la mirada de los desafíos que tiene la Argentina de cara al futuro. Hay un eje central, que se trata de generar los consensos y la concertación necesaria para implementar las políticas, no sólo de cara a la emergencia, sino también de un desarrollo a mediano y largo plazo.
-¿Tienen bajo análisis una reforma agraria, como propuso Juan Grabois?
-Ninguno de nuestros equipos de trabajo ha presentado una iniciativa que se asemeje a eso. Creemos que uno de los desafíos importantes del sector es seguir transitando un modelo de desarrollo que incluya los consensos necesarios para fortalecer a un sector estratégico de nuestra economía. Bajo ningún punto de vista hay en estudio un proyecto de esas características, más allá de que lo ha planteado Juan Grabois desde su espacio.