La legisladora Claudia Calciano, que responde al Momo Venegas, cree que el triunvirato que conduce a la CGT no tiene motivos para convocar a un paro general contra el gobierno de Mauricio Macri. La diputada porteña del bloque Pro pertenece al riñón del titular de Uatre, Gerónimo “Momo” Venegas, uno de los pocos sindicalistas que apoyan sin reparos a la Casa Rosada. En diálogo con Noticias Urbanas, Calciano afirma que la central obrera es “massista”. “Es una CGT que no está velando por los derechos de los trabajadores, sino que está haciendo política”, advierte.
Calciano considera que hay que darle más tiempo a la administración de Cambiemos para hacer una evaluación de la gestión, niega que Macri “gobierne para los ricos” y asegura que los sectores “más apretados” por el Gobierno son los empresarios y la clase alta.
Además, la legisladora porteña sostiene que la ex presidenta Cristina Kirchner impulsa un plan para destituir a Macri, pero advierte: “No vamos a permitir que nada desestabilice al Gobierno”.
–¿El Gobierno puede evitar el paro general de la CGT?
–Hay que contextualizar. Ni los peronistas ni los obreros consideramos que esta conducción de la CGT nos represente, por las desprolijidades que hubo en las últimas elecciones. En segundo lugar, esta es una CGT que no está velando por los derechos de los trabajadores, sino que está haciendo política. Se ha convertido en una central massista y está velando por sus intereses. Cuando ocurre eso, vemos lo que pasa en estos días. Los docentes ni siquiera se sientan a escuchar la perspectiva de lo que estamos proponiendo para levantar el paro. Lo que están haciendo es politizar e ir a otro paro porque quieren la destitución de Macri.
–¿Usted sostiene entonces que tiene que surgir otra CGT?
–Totalmente. Las 62 Organizaciones Peronistas, que lidera Venegas, son la columna vertebral del PJ. En ese espacio están alineados más de 80 gremios que no están de acuerdo con destituir a la democracia y poner palos en la rueda a un gobierno que está hace un año y que ingresó después de una gestión que fundió al país. La conducción actual de la CGT no tiene ideas ni manejo. Cuando estábamos nosotros en la CGT jamás hubo un desmadre como el que vimos en la marcha del 7 de marzo. Esta CGT massista nos ha hecho más paros que en todo el gobierno de Cristina.
–Después de los incidentes, Pablo Moyano dijo: “Con Hugo esto no pasaba”.
–Moyano ha cometido errores, pero Pablo tiene razón. Moyano tenía una lectura política. Podías estar de acuerdo o no en algunas temáticas, pero él sabía lo que era el movimiento obrero organizado. Esta gente (por el triunvirato) no sabe de lo que está hablando. Claramente tienen intereses políticos.
–¿Quiénes estuvieron detrás de los incidentes en el acto? Apuntaron contra el kirchnerismo y la izquierda.
–La izquierda ha tenido un rol, pero –lo digo como peronista– sabemos que no tiene estas reacciones. Acá estuvo la mano del kirchnerismo. Se puede ver en las escuchas de Cristina y Oscar Parrilli que se conocieron. Esas conversaciones te muestran con claridad que el paro docente está politizado y eso es lo que nos da bronca. No están reclamando por el salario. Se está politizando y en esa politización están perjudicando los derechos de los niños de estudiar.
–¿Usted cree que Cristina está al frente de un plan desestabilizador?
–Sí, totalmente. Pero no lo va a lograr porque estamos trabajando. Los verdaderos peronistas, que integramos las 62 Organizaciones, estamos unidos y tenemos claro que vamos a dar batalla y no vamos a permitir que nada desestabilice al frente Cambiemos. Este es un frente que surgió contra la corrupción absoluta que veníamos viendo y que destruyó a nuestro país. No vamos a permitir que nada desestabilice a este gobierno.
–Respecto del conflicto con los gremios, ¿se adelantó el debate electoral o es parte de una interna del PJ?
–El debate electoral se adelantó. Cristina y el kirchnerismo están moviendo los últimos hilos que les quedan, pero en Cambiemos tenemos una postura frente a las elecciones. No salimos a hacer política, todavía no estamos pensando en eso. Estamos en la gestión y creo que esta gente está tratando de desestabilizar para armar un debate mucho antes de lo que pensábamos. No podemos hacer política porque hoy estamos preocupados por la gestión.
–¿Concuerda con Carrió en que si Cambiemos gana los comicios lloverán las inversiones?
–Las inversiones aún no han llegado porque lo que se hizo el año pasado fue poner en orden el país. Tengo encuentros con cancilleres y hay intenciones de venir a invertir en la Argentina, pero no había un marco jurídico. El año pasado se salió del cepo cambiario, el Indec normalizó sus índices y los difundió. En el exterior hay un gran interés por invertir, pero había que poner la casa en orden.
–¿El Gobierno tiene que adaptar su plan económico a las elecciones? Habría medidas para atenuar el impacto del tarifazo en el conurbano.
–Sabemos que ha habido impactos. Aranguren me decía hace poco que no había energía. No había otra forma de hacerlo. No es que se hizo al libre albedrio porque son oligarcas. ¿Cuántos cortes de luz hubo en el verano?
–Hubo cortes, pero se percibe que menos que el año pasado.
–Porque se invirtió. Hay una desaceleración económica que repercute y hay gente que la está pasado mal, pero no decimos lo contrario. Esto es como cuando te metés en un crédito porque te faltó guita y tenés que ajustarte unos meses, pagar tu crédito y volver a llenar tu bolsillo.
–¿No faltó un mensaje más claro del Gobierno respecto del ajuste? Crearon falsas expectativas con “el segundo semestre”.
–El Gobierno es muy tecnócrata para comunicar. Comunica de esa forma. Si hubiera sido un peronista habría salido a decir “hay que ajustar el cinturón porque estamos en esta situación, nos dejaron esto”. Hemos reivindicado un montón a los planes sociales, estamos atendiendo a los sectores más vulnerables y apretando a quienes más hay que apretar: el empresariado. Macri dijo que los empresarios tienen que moverse y salir a prestar un poco de servicio porque si no va a abrir la importaciones para que se ponga competitivo. No se ve, pero los más apretados con los impuestos son los empresarios y la clase alta.
–¿Es un prejuicio entonces que Macri “gobierna para los ricos”?
–Si pudieran escucharnos un poco más y tuvieran un poquito más de memoria de cómo estábamos el año pasado y vieran la cantidad de venezolanos que piden asilo en la Argentina porque no soportan más vivir en Venezuela, empezarían a pensar diferente. Si hubiera ganado de nuevo el kirchnerismo, estaríamos como Venezuela.
–Se habla de que Sanz sería nombrado en el Gabinete. ¿Macri debe hacer cambios?
–El Presidente tiene al Gabinete perfectamente organizado. Sanz puede estar o no presente desde el cargo, pero está permanentemente al lado de Macri, como Venegas, asesorándolo. No creo que sea necesario un cambio de gabinete porque lo que Sanz presta es más importante que ser ministro. Está siendo transversal a todos los ministerios y es lo que Macri necesita.