Las reservas brutas internacionales del Banco Central (BCRA) perforaron el “piso” de los US$50.000 millones al mermar en otros US$117 millones y anotar su 35° retroceso consecutivo, con lo que alcanzaron su menor nivel en 10 meses.
La estratégica tenencia quedó en US$49.968 millones, con lo que acumula un descenso de US$18.103 millones desde el pasado 26 de julio, día en que había registrado la última aunque muy módica suba diaria aún traccionada por el alza de los depósitos bancarios en dólares, y llega a su menor nivel desde el 14 de diciembre de 2018.
Es decir, desde entonces acumula un ritmo de caída promedio de US$517,2 millones diarios, que se elevó con fuerza tras los resultados de las PASO (se hundieron en US$6341 millones desde entonces) y el anunciado reperfilamiento compulsivo de la deuda local de corto plazo (bajaron US$6076 millones desde ese día). Además, la caída llega a US$27.513 millones si se mide contra el récord que alcanzaron el 9 de abril tras la llegada del cuarto (por US$10.818 millones) de los cinco giros por un total de US$44.867 millones realizados por el FMI, como parte del acuerdo de asistencia al país.
Los analistas explican que el desplome en la tenencia bruta (que tiene un ritmo tres veces superior al de la tenencia neta) es producto de “la caída del crédito externo y el derrumbe en la demanda de activos domésticos. Y lamentablemente se va a mantener en la medida en que el país no logre recuperar la confianza”, explicó el consultor Hernán Hirsch.
El dato llegó al final de una jornada en la que el dólar se volvió a mostrar más demandado que ofrecido pese a las restricciones dispuestas a su compra para las empresas y las limitaciones para las personas y -sobre todo- a las obligaciones impuestas a los exportadores para liquidar.
El precio del billete trepó 13 y 33 centavos para la venta mayorista y minorista (cerró ofrecido a $56,26 y $58,77 en cada caso), lo que supone alzas del 0,3 y 0,55%, respectivamente. Fue tras otra rueda de escaso volumen (se negociaron de contado US$359,5 millones, casi 10% menos que el viernes) y en la que el BCRA se vio obligado a suplir con ventas puntuales de reservas (se estima que por unos US$30 millones en total) la carente oferta privada.
“Como se suele decir, ‘marcó la cancha’ para que el precio de la divisa no tuviera desbordes”, apuntó Fernando Izzo, de ABC Cambios. “Con su presencia, el BCRA acotó la suba”, coincidió Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio.
El movimiento levemente alcista del dólar en la plaza de contado se contrapuso a la tendencia bajista que los precios de la divisa mostraron en las operaciones cambiarias bursátiles, que venían desbocados en las últimas dos ruedas.
Esto quedó a la vista con la baja del 4% que mostraron las cotizaciones del dólar bolsa (o MEP) y del contado con liquidación al cerrar a un promedio de $66,30 y $69,93, cuando habían quedado el viernes levemente debajo de $70 y por encima de $73, respectivamente. Así, las brechas con el oficial, que se habían estirado hasta 24 y 30%, cayeron al 17,8 y 24,2%.
En tanto, el BCRA recortó por segundo día la tasa de referencia de la economía, que cayó otros 14 puntos básicos, para quedar en 84,01%, un nivel elevado (de los más altos desde julio de 2002), pero a la vez el más bajo en lo que va del mes.
