La fuga de los tres imputados por el triple crimen de la efedrina provocó repercusiones políticas de todo tipo. Uno de los que no se calló nada fue el exjefe de Gabinete de la Nación, Aníbal Fernández. El excandidato a gobernador bonaerense vaticinó la posibilidad de que los evadidos aparezcan muertos.
El pronóstico no cayó nada bien en el Pro. El ministro de Justicia y Seguridad del Gobierno de la Ciudad, Martín Ocampo, salió a cruzar en duros términos a Fernández.
“La lucha contra el narcotráfico es un compromiso de todos y las autoridades políticas comprometidas merecen el máximo respaldo de todos los sectores de la ciudadanía”, dijo para comenzar Ocampo.
Lo más fuerte estaba por venir. “Las declaraciones del exjefe de Gabinete pretenden embarrar la cancha y parecen un intento por deslindar responsabilidades”, acusó el funcionario porteño.
Por último, Ocampo apoyó el trabajo que vienen realizando la gobernadora María Eugenia Vidal y su ministro de Seguridad, Cristian Ritondo.
“Sabemos del compromiso de la gobernadora y de su ministro de Seguridad con el trabajo incansable para esclarecer lo ocurrido. Desde la Ciudad ponemos a disposición todas las herramientas y nuestra voluntad de trabajar mancomunadamente”, concluyó el ministro de Justicia y Seguridad del Gobierno de la Ciudad.
