Oliveto: “Los narcos están metidos en la toma de Villa Lugano”

Oliveto: “Los narcos están metidos en la toma de Villa Lugano”

Por Laura Di Marco

Como flamante legisladora, se acercó junto a otros pares al predio ocupado. Afirma que la PM "no estaba equipada para enfrentar la situación” y que hubo dirigentes que fueron a hacer política.


Fue una de las legisladoras porteñas que estuvieron presentes en la toma de Villa Lugano, y haber estado allí, asegura, le cambió la perspectiva del conflicto. A los 41 años, esta abogada que es espada de Elisa Carrió acaba de obtener, por primera vez, una banca en la Legislatura porteña. El lema predilecto de Paula Oliveto es “Ni macrista ni kirchnerista: carrioísta”, y asegura que en esta nueva etapa (viene de la Auditoría General de la Ciudad) está dispuesta a “aprender de los legisladores que tienen más experiencia parlamentaria” que ella. Conoce el sur de la Ciudad porque se crió allí, en Mataderos. Y, desde la renovación de bancas, integra una Legislatura cruzada por las internas calientes que cocina 2015. En este lapso compartirá el recinto con integrantes de La Cámpora, al mismo tiempo que su fuerza deberá ensayar un contrapeso con el oficialismo macrista.

“Nosotros somos medio antisistema”, dirá, más de una vez, en la contra de NU, aludiendo a que la Coalición Cívica no comulga con las prácticas más discutidas de la corporación política, sobre todo las que se usan para construir poder en los territorios con los punteros tradicionales.

–Debutó como legisladora con la toma en Villa Lugano, un indicador de que la conflictividad social está en ebullición. ¿Cómo evalúa el conflicto, después de haber estado allí?

–Sí, fui porque era necesario que los legisladores estuviéramos para garantizar que la resolución del conflicto fuera pacífica. Y te digo que haber estado allí me cambió la percepción. Estuvimos con Maxi Ferraro, mi compañero de Unen, y la verdad es que no hablamos con ningún periodista estando allí porque me parece inadmisible que algunos vayan para hacer política con los pobres, como ha ocurrido. Fuimos sin especulaciones, y vimos que la Metropolitana no estaba preparada para enfrentar la toma si la cosa se desmadraba. El escenario era realmente muy peligroso, por eso fue tan bueno que los políticos hayamos ido. Adentro había unas 3.000 personas, muchas armadas; estaban metidos los narcos también. Y, en la primera línea de los que estaban adentro, había chicas embarazadas y niños. La Metropolitana, por su parte, solo contaba con 300 efectivos. Creo que con ese dato está todo dicho. Cualquier acción represiva de la policía allí hubiera sido una masacre. Es necesario que actúe la Justicia, como lo está haciendo. El conflicto necesita un tercero imparcial que medie entre las partes. La jueza Liberatori está haciendo un excelente trabajo.

–¿Está de acuerdo con las tomas?

–No, nunca estuve de acuerdo. Por definición no estoy de acuerdo con hacer cosas que estén fuera de la ley. Pero también tengo sensibilidad. Más allá de la legalidad o no legalidad, la toma es la expresión de una crisis económica y política. Además de eso, están los narcos. Muchos de los jefes narcos gerencian las viviendas que alquila esta gente, que es la más vulnerable. Y muchos de los que protagonizaron la toma tienen que pagarles a estos tipos 1.800 pesos mensuales por un cuartucho de mala muerte. Además, son los mismos que les venden la droga. Y luego está la inseguridad en la Villa 20. Hay que tener en cuenta que en la Comuna 8, donde está la villa, no tiene incumbencia la Metropolitana. Ahí es incumbencia del Gobierno nacional.

–¿Entonces?

–Bueno, entonces la Presidenta no puede hablar como lo hace, como si fuera una comentarista, una periodista. La conflictividad social es un coctel de inflación e inseguridad, y ambas cosas fueron generadas por una mala gestión del Gobierno. Es el Gobierno quien tiene la máxima responsabilidad en este conflicto. También es su responsabilidad combatir el narcotráfico. Desde la Coalición hemos hecho un diagnóstico de la situación por demás exhaustivo, señalando cuál es la ruta de la droga. Pero es al Ejecutivo a quien le toca enfrentar el tema.

–Circula que en la toma hay un puntero vinculado al Coti Nosiglia, Marcelo Chancalay. ¿Lo conoce?

–No le conozco la cara, no lo vi en mi vida. Sé que ese nombre ha circulado y que se lo vincula a Nosiglia. Pero realmente, como nosotros somos medio antisistema, jamás tuve contacto con este tipo de punteros. Habría que preguntarle a Nosiglia.

–Pero la UCR y Nosiglia están en Unen.

–Sí, pero insisto, yo no lo conozco. Sé, por supuesto, que hay una red de punteros vinculados con la política tradicional y que esa red, en muchos casos, también está vinculada al negocio narco. Eso es lo que se dice, y habría que probarlo e investigarlo más a fondo. Pero, bueno, con Lilita hemos hecho mucho para controlar esa mafia criminal. Sin ir más lejos, hemos acompañado al fiscal que investigó el crimen de Unicenter, vinculado al narcotráfico.

–Recientemente, Carrió criticó a Binner, justamente por la situación narco en Rosario.

–No creo que lo haya criticado. Simplemente en Rosario, que por algo en su momento se la bautizó “la Chicago argentina”, hay un gran problema con esta mafia y es necesario reforzar los controles sobre la Ruta 34. Eso, nomás. La protección de los ciudadanos es una responsabilidad del Estado.

–Siembre está sobre Unen la preocupación acerca de si podrá mantener la unidad. Por ejemplo, Gustavo Vera, que encabezó la lista de legisladores, se queja de que no integra la mesa de conducción del espacio y de que no lo incluyen.

–A veces, creo yo, a la gente que viene de las ONG les cuesta jugar en equipo. Para nosotros es un placer jugar en equipo con él, y el hecho de haber sido cabeza de lista, junto con Pino Solanas y Elisa Carrió, creo que es un reconocimiento suficiente. Sin ir más lejos, yo hace diez años que estoy con Carrió y recién ahora tengo una banca, que obtuve desde el quinto lugar de la lista que integré. Vera no integra la conducción porque eso es para los partidos. Sí integra, por supuesto, la conducción parlamentaria. Quiero decir: hay que saber trabajar en equipo.

Punto por punto

• Edad: 41 años.
• Profesión: Abogada.
• Ocupación: Legisladora de Unen y vicepresidenta de la CC-ARI Capital.
• Estado civil: Casada (tiene dos hijos, de 4 y 10 años).
• Restaurante porteño: The New Brighton.
• Una frase: “Todo pasa”.
• Un perfume: Carolina Herrera, clásico, desde hace 15 años.
• Una película: Los puentes de Madison, de Clint Eastwood.
• Una figura histórica: Manuel Belgrano.
• Esquina porteña: Ventura Bosch y Lisandro de la Torre (la de su escuela secundaria).
• Barrio porteño: Mataderos.

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