El canciller argentino, Santiago Cafiero, reiteró en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York la vocación de paz que sostiene Argentina para América Latina, pidió avanzar en zonas libres de armas nucleares y abogó por “edificar sociedades más justas en un planeta equilibrado” y volvió a condenar la presencia de bases militares del Reino Unido en el Atlántico Sur.
La Décima Conferencia de Revisión del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares (TNP) de Naciones Unidas (ONU) fue presidida este año por la Argentina y se extenderá hasta el martes.
Argentina fue elegida por aclamación para presidir la 10° Conferencia de Examen del Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares de la @ONU_es ⚛️
🇦🇷 La promoción de los usos pacíficos de la tecnología y la energía nuclear es política de Estado en nuestro país. pic.twitter.com/3PeCL0B19k
— Cancillería Argentina 🇦🇷 (@CancilleriaARG) August 1, 2022
Al hacer uso de la palabra, Cafiero indicó: “Hasta tanto las armas nucleares se hayan eliminado de manera completa, transparente e irreversible, los Estados no poseedores debemos tener la garantía de que no seremos susceptibles de la amenaza o el uso del armamento nuclear. No quisiera dejar de resaltar que la mera existencia de estas armas supone un riesgo sistémico, tal como se puso de manifiesto en diferentes acontecimientos derivados de la invasión de Rusia sobre Ucrania”.
Además, el Canciller argentino destacó: “Una medida concreta es avanzar en el retiro de las declaraciones interpretativas a los Protocolos de los Acuerdo de las Zonas Libres de Armas Nucleares. Para la Argentina, ello es particularmente importante a la luz de la prolongada e injustificada presencia militar del Reino Unido en el Atlántico Sur, complemento de la usurpación de tierras y mares circundantes de nuestro país, lo que incluye el desplazamiento de submarinos con capacidad de portar armamentos nucleares en esta Zona Desnuclearizada”.
El representante de la diplomacia argentina insistió en condenar la presencia militar en el Atlántico Sur: “Recientemente tomaron estado público documentos desclasificados en los Archivos Nacionales de Londres que prueban que, durante el conflicto del Atlántico Sur de 1982, el Reino Unido envió a la región buques equipados con 31 armas nucleares, lo que representaba en ese entonces el 65% de su stock de bombas nucleares de profundidad. Además de tratarse de una significativa cantidad, la mera presencia de esas armas implicó, no sólo para la Argentina sino para la toda región, un grave riesgo nuclear tanto en términos de contaminación radioactiva en el Atlántico Sur, como por las catastróficas consecuencias humanitarias asociadas al armamento nuclear”.
Al respecto, agregó: “Esta información, que Argentina subrayó en distintas oportunidades ya ha tomado estado público, casi 40 años después de que tuvieran lugar los hechos, período durante el cual el Reino Unido negó categóricamente poseer armas nucleares en la zona del conflicto del Atlántico Sur. Esa conducta es violatoria de la obligación de obrar de buena fe y demuestra la falta de garantías de transparencia acerca de la presencia de armas nucleares en el Atlántico Sur”.
“Preservar el Tratado de Tlatelolco e implementar de manera cabal sus provisiones significa preservar también la primera Zona Libre de Armas Nucleares en una zona densamente poblada como lo es la región de América Latina y el Caribe. Lo señalo en nombre de mi país y también porque la Argentina ejerce en este momento la Presidencia Pro Tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC)”, afirmó.
Ya sobre el final de su exposición, Cafiero destacó que “es necesario que las cinco potencias nucleares con asiento permanente en el Consejo de Seguridad se manifiesten individual y colectivamente reafirmando los compromisos del tratado. Accionar las medidas de desescalamiento nuclear en torno al caso de Ucrania multiplicando los sistemas de verificación. Proponer una zona de desnuclearización en Europa que contemple a los países sin armas nucleares”.
Y concluyó: “Nuestros pueblos quieren paz para superar la postergación, la desigualdad y la injusticia”.