La pandemia dejó a los barrios populares en un estado de vulnerabilidad que el nuevo Frente por una Ciudad Justa y Solidaria en la Ciudad buscará revertir uniendo las voces de 45 organizaciones sociales y políticas que representarán a las villas porteñas, ante “la falta de respuesta en aspectos sociosanitarios del Gobierno de la Ciudad”. Con este accionar, apuntan a tener respaldo dentro de la Legislatura porteña para materializar los reclamos que, sin éxito, efectuaron hasta ahora cada organización por su lado.
“A raíz de que surgió la pandemia, somos nosotros los que nos ponemos al hombro los reclamos de nuestros vecinos y vecinas. Nos cansamos y conformamos este frente”, indicó Marcelo Urquiza, referente de Comunarte NEP en Villa 20 Lugano, en diálogo con Noticias Urbanas. Y agregó:
“Queremos poner a la luz de los ojos de los ciudadanos y ante el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, las problemáticas que tenemos en común todas las villas/barrios populares, inquilinatos y complejos habitacionales y buscar soluciones a las demandas de nuestros vecinxs”.
El frente fue creado durante el mes de junio en un acto realizado frente a la Sede de Gobierno porteño, en Uspallata 2802. El encuentro fue coronado con la firma de un documento conjunto, que expresa la preocupación de las villas porteñas por la emergencia alimentaria, sanitaria y social en el distrito.
Entre las 45 organizaciones firmantes se encuentran La Cámpora, el Nuevo Espacio de Participación, el Movimiento Evita, Unidos y Organizados, El Hormiguero, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa, Barrios Peronistas y la Corriente Nacional de la Militancia, CTA Capital, Partido Comunista, Kolina, La Dignidad, Nueva Mayoría-Frente Patria Grande, Igualar, entre muchas otras.
Además, el frente recogió la adhesión de organismos y referentes de Derechos Humanos, referentes sindicales y de agrupaciones religiosas, migrantes y culturales y el respaldo político de legisladorxs, referentes y funcionarixs como Hebe de Bonafini y Taty Almeida (Madres de Plaza de Mayo), Pablo Moyano (UTE), Eduardo López (CTA CABA); senadores y diputadxs del FDT: Paula Penacca, Mariano Recalde, Gisela Marziotta, Eduardo Valdés, Mara Brawer, Carlos Heller, Itaí Hagman y Gabriela Cerruti, entre otrxs representantes de sectores académicos, comerciales y de izquierda.
La Ciudad fue el distrito nacional con mayor tasa de contagios y muertes por Covid-19, por lo que el Frente por una Ciudad Justa y Solidaria propone que el Gobierno local impulse una serie de medidas para morigerar los efectos de la crisis y fortalecer así la economía popular.
Por esto, en el comunicado las organizaciones mencionan: “Vemos con inmensa preocupación cómo el Jefe de Gobierno Rodríguez Larreta, quien siempre privilegió lo privado por sobre lo público y defendió los intereses del poder económico concentrado, no ha sido capaz de dar respuesta a la crisis alimentaria que se vive actualmente en los barrios más humildes de nuestra ciudad, mientras atravesamos la segunda ola de contagios de Covid-19”.
También hacen hincapié en los recortes y las subejecuciones presupuestarios, al mencionar que “el Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad tuvo un recorte de 940 millones de pesos y en el programa que asiste a comedores, del que hasta el momento sólo ejecutó el 1% del total”, y que aunque “las clases presenciales comenzaron el 17 de febrero”, “se ejecutó sólo el 6% del presupuesto del área de Asistencia Alimentaria Y Acción Comunitaria del Ministerio de Educación de la Ciudad”.
Propuestas concretas
“El impacto que buscamos con este frente es que el Gobierno de la Ciudad escuche finalmente los reclamos que venimos haciendo desde hace mucho tiempo lxs vecinxs de las villas y barrios populares”, explicó Marcelo Urquiza.
En el mencionado documento, enumeraron cuáles son los reclamos y propuestas concretas que realizan desde este nuevo espacio:
1) Reforzar la asistencia alimentaria a comedores comunitarios, merenderos y ollas populares que funcionan diariamente en la Ciudad, sin reconocimiento ni asistencia por parte del GCBA. Reabrir el programa de grupos comunitarios; garantizar la asistencia alimentaria a las familias aisladas; universalizar la canasta alimentaria escolar, con mayor cantidad, calidad y nivel nutricional.
2) Crear un Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) de la Ciudad de Buenos Aires que asista a los sectores más afectados por la pandemia. Reforzar extraordinariamente aquellos programas que refieran a asistencia alimentaria y habitacional.
3) Lanzar medidas vinculadas a la economía popular que incentiven el trabajo, que fomenten los proyectos productivos y que garanticen que los productos elaborados por cooperativas y PyMEs accedan a las góndolas de las grandes cadenas de supermercados.
4) Reconocimiento económico a lxs trabajadorxs de comedores y merenderos que realizan tareas de cuidado comunitarias, esenciales durante la pandemia.
5) Garantizar el acceso a una atención sanitaria adecuada a las personas que atraviesan la enfermedad producida por el Covid-19, así como también los servicios para las víctimas fatales de la enfermedad.
“En la Ciudad más rica, con el presupuesto más alto del país, no podemos aceptar que no tengan una política hacia los barrios más vulnerables en medio de la pandemia. No puede ser que no hayan hecho un IFE, que nos recorten la mercadería alimenticia que antes nos entregaban, que no se aumenten los subsidios habitacionales en porcentajes admisibles ya que los alquileres subieron mucho, que no nos ayuden a costear los velorios y entierros de las víctimas fatales de Covid-19, que dejen a la deriva a personas con discapacidad y a las mujeres que sufren violencia de género, que se incrementó en estos tiempos”, opinó Urquiza. Y completó: “No tienen una política socioeconómica para que estas personas puedan sobrellevar esta situación, mucho menos para las personas que están en situación de calle”.
De norte a sur
Cada parte de la Ciudad tiene distintas problemáticas. En el diagnóstico de la situación social de la Ciudad, las organizaciones destacaron la diferencia que existe entre los indicadores del sur y el norte: “El Gobierno de la Ciudad debe llevar adelante medidas extraordinarias, que resuelvan estas situaciones apremiantes. En paralelo, se deben tomar medidas que apunten a combatir la desigualdad en términos de ingresos y de acceso a derechos básicos, como son la salud, la educación y el hábitat digno y generar trabajo”.
“En la Ciudad, el desempleo llega al 10%, pero en la zona sur de la Ciudad llega al 15%, más que duplicando a la zona norte de la Ciudad. Las mujeres, lxs jóvenes y lxs trabajadorxs de la economía popular fueron lxs más afectadxs por la pandemia”, señalaron en el documento.
Con respecto a la falta de inversión del Gobierno de la Ciudad durante la pandemia, aseguraron: “La dramática situación demanda medidas urgentes, responsabilidad y voluntad para frenar la segunda ola y cuidar la vida de todxs. No es un problema de falta de recursos, sino de voluntad política. El distrito más rico del país cuenta con los recursos suficientes para implementar medidas extraordinarias”.
“Queremos que nuestrxs vecinxs sepan que no están solxs. Que si el Gobierno de la Ciudad los abandona, nosotrxs vamos a estar ayudando con nuestro granito de arena, pero sabiendo que la mayor responsabilidad la tiene el Ejecutivo. Por eso tenemos este frente”, cerró Urquiza.