Desde principios de año, los bloques de Unidad Ciudadana, Argentina Federal, el Evita y el massismo, avanzan en una unión para voltear el megadecreto de Mauricio Macri que necesita ser rechazado en Diputados y Senadores para poder darse de baja, de lo contrario el DNU presidencial actúa como una ley normal.
Esto ha dividido las aguas y la aceptación o rechazo a esta medida oficial comenzó a marcar dos bandos dentro del Congreso.
Ahora, a pesar de que los gobernadores habían concretado el Pacto Fiscal con el Presidente de la Nación, el interbloque de diputados Argentina Federal -identificado con los mandatarios provinciales-, piensa en aliarse esta vez al kirchnerismo para conseguir los votos necesarios que den de baja este megadecreto.
Sin embargo, por otro lado, el secretario legal y técnico Pablo Clusellas defendió el megadecreto en doble turno, quien abordó el tema de la habilitación al Fondo de Garantías de Sustentabilidad (FGS) para operar libremente en el mercado de financieros y crear fideicomisos, uno de los ítems más polémicos del megadecreto. “Las operaciones financieras están fuera del régimen de compra y los fideicomisos son un vehículo necesario”, la defendió el secretario.