La victoria de Donald Trump en los Estados Unidos generó una gran conmoción en todo el mundo y se transformó en un importante desafío para el Gobierno argentino, que durante la campaña respaldó explícitamente a la demócrata Hillary Clinton.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, aseguró que la victoria del candidato del Partido Republicano representa un “cambio que todavía genera mucha incertidumbre” porque ahora todo el planeta está esperando para ver si el futuro presidente se desempeñará de acuerdo a las promesas que hizo durante la campaña o si será “más moderado” como se ha mostrado desde la madrugada del martes.
“De todas formas se ha logrado fortalecer las relaciones con los Estados Unidos, que estaban en su pico histórico de malos vínculos. La relación bilateral va a ser buena. Quizás algunas cosas nos ayuden y otras nos perjudiquen”, evaluó el funcionario.
El presidente Mauricio Macri se refirió a la victoria del magnate. Admitió que estaba sorprendido por el resultado, pero se puso a disposición de la nueva administración para sentarse a dialogar y buscar acuerdos.
