El juez federal Julián Ercolini solicitó la extradición del mexicano Isaac Eugenio Esparza Hidalgo, detenido días atrás en ese país por sus vínculos con Daniel Muñoz, el exsecretario de Néstor y Cristina Kirchner que lavó en el exterior unos 70 millones de dólares.
Esparza Hidalgo, que tenía un pedido de captura internacional desde 2019, fue localizado a principios de este mes en el cruce de las calles Jardín del Edén y Del Refugio en el barrio Jardín de las Torres, mientras conducía un automóvil Honda City.
El pedido de detención había sido firmado por el fallecido juez Claudio Bonadio cuando se había descubierto el entramado internacional de la organización de lavado de dinero que manejó Muñoz, receptor primario de los bolsos con coimas que se pagaron durante los años del kirchnerismo.
En aquella ocasión se había solicitado también la captura de tres abogados, un contador y un inversor de Miami y de Turks and Caicos, ya que, gracias a la confesión de Carolina Pochetti, viuda del millonario ex secretario privado de los Kirchner, se supo que parte del dinero obtenido ilegalmente fue a parar a una inversión en esas islas del Caribe.
La intención del magistrado es que este hombre, que en el último tiempo se dedicaba a promocionar pronósticos y apuestas deportivas en Monterrey, sea indagado en la Argentina en el marco de un expediente derivado de la causa conocida como los Cuadernos de la Corrupción.
El exhorto dictado por Ercolini, que quedó a cargo de la causa, detalla que Esparza Hidalgo está acusado de “integrar una estructura jurídica, societaria y bancaria tanto en el exterior como en este país, destinada al lavado de varios millones de dólares, de parte de los fondos recaudados por una asociación ilícita conformada por más de setenta personas, entre ellas dos presidentes de la República Argentina y varios integrantes de su Gabinete, que desarrollaron esa actividad delictiva durante 12 años”.
En el texto del pedido, al que accedió Infobae, el magistrado remarca que “Muñoz resultó un engranaje clave en el circuito de acumulación y traslado del dinero de esa asociación ilícita, en particular en lo referido a la recaudación de los fondos ilegales”.
En el escrito se señala que “más de sesenta” coimas “que fueron recibidas personalmente” por el ex funcionario y derivadas a otras personas, “incluyendo el traslado semanal del dinero en valijas y por medio de aviones oficiales de la Agrupación Aérea Presidencial desde el sector militar del Aeroparque Metropolitano ‘Jorge Newbery’ de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hasta los aeropuertos de Río Gallegos y El Calafate, en la Provincia de Santa Cruz” y “la aplicación de esos fondos a otras actividades delictivas”.
De acuerdo con la investigación, “el 11 de febrero de 2019 se tuvo por reunido el mérito suficiente para ordenar la detención” de Esparza Hidalgo y de otros individuos que, “tras tomar estado público los ‘Panama Papers’ tuvieron intervención en la liquidación de la estructura societaria e inmobiliaria de la organización en los Estados Unidos de América y en la posterior reconducción de los fondos a nuevas inversiones”.
En ese contexto, el sospechoso está siendo investigado por presunto “lavado de activos de origen delictivo agravado por su comisión por parte de una asociación formada para la comisión continuada de hechos de esa naturaleza”.
El juez Ercolini solicitó “la extradición de Isaac Eugenio Esparza Hidalgo al Sr. Juez de Distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio del Centro de Justicia Penal Federal en la Ciudad de México, de los Estados Unidos Mexicanos, mediante el libramiento del pertinente exhorto internacional, formalizando dicho pedido a través de la vía diplomática, por intermedio de un oficio dirigido al Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto”.
Para argumentar su decisión, el magistrado señaló que la acción penal contra el acusado “se encuentra plenamente vigente” y que el hecho que se le imputa “resulta susceptible de extradición” y “no es político ni conexo con un delito político”.
En lo que se refiere a su nacionalidad mexicana, consideró que esta causa “constituye un caso excepcional que justifica de todos modos su entrega para su juzgamiento en nuestro país, conforme lo provee expresamente el artículo 14 de la Ley de Extradición Internacional de los Estados Unidos Mexicanos”.
Además, mencionó que las “circunstancias apuntadas, de enorme gravedad institucional, configuran por sí solas un supuesto de excepción” y que “no pueden dejar de mencionarse los numerosos instrumentos internacionales suscriptos por ambos Estados, asumiendo su compromiso de prestar colaboración para combatir este tipo de delitos”.