Lejos, cada vez más lejos, quedó aquella dupla que le arrebató al FPV la senaduría y varias diputaciones nacionales en 2013 cuando desplazó desde UNEN al kirchnerismo al tercer escalón de los comicios.
Si bien Lousteau aportó lo suyo, quien descolló en esas elecciones fue la chaqueña Elisa Carrió, quien empujó al cineasta Pino Solanas al Congreso de la Nación.
Pero lejos quedó ese matrimonio por conveniencia entre Carrió y Solanas. Las peleas aparecieron casi de inmediato pasadas aquellas elecciones, y cada vez se acentúan más y más.
Ahora, tras las declaraciones de Carrió contra quien encabezara la lista de legisladores en ese entonces, Gustavo Vera, Pino salió al cruce de la diputada, a quien tildó de mentirosa y falsificadora, además de achacarle que no tiene ética ni estatura moral.
Pino, tercero en discordia, salió a defender a Vera y atacó a Carrió por negarse a realizar un repudio a la exSIDE en la campaña de 2013.
Pino buscó además vincular a Carrió con los ex servicios Pocino y Stiusso, al contar que en 2013 la blonda chaqueña se negó a firmar una denuncia penal contra ambos exSIDE.
Pero con contento con ello, Pino atacó de manera más directa a Carrió: dijo que “no tiene estatura moral ni ética” para criticar a Gustavo Vera y al papa Francisco: y que la chaqueña “hace mucho tiempo” que “hizo de la mentira y la falsificación una práctica cotidiana”.
A sabiendas de la lengua filosa y rápida, esta novela de exparejas promete tener pronto un nuevo episodio.