Después de que se diera a conocer el informe PISA, que se elabora anualmente y que en 2012 ubicó al país en el puesto 59 de un total de 65 naciones, el jefe de Gobierno con la vicejefa y el ministro de Educación brindaron detalles sobre el escrito que pese a los resultados negativos, ubicó a la Ciudad al tope en el área de matemática.
Previo a ello, el mandatario convocó a la oposición a discutir la creación de un Instituto de Calidad Educativa “con metas claras y específicas” y advirtió que la Argentina “necesita poner a la educación como eje central de debate para no seguir comprometiendo el futuro de nuestro país y de nuestros jóvenes”.
Macri se pronunció en esos términos al difundir junto a la vicejefa de Gobierno, María Eugenia Vidal, y el ministro de Educación, Esteban Bullrich, los resultados que arrojó en la ciudad el informe PISA, la evaluación internacional que analiza el rendimiento educativo de alumnos de 15 años en 65 países. “Nos dice que, comparándonos con el resto del mundo, tenemos un problema, porque nuestros niveles educativos no son los que aspiramos”.
“En la Ciudad de Buenos Aires hemos avanzado mucho y eso se refleja en que estamos mejor evaluados que la Nación, pero tampoco nos alcanza, porque claramente queremos compararnos con los mejores países del mundo. Esa es la manera de garantizarle libertad y futuro a nuestros jóvenes”, subrayó.
“Por esa razón- agregó- es fundamental un compromiso con la educación pública que sea compartido por la dirigencia política y por toda la sociedad y que tenga metas claras y evaluables año tras año”.
Y explicó específicamente en la Ciudad de Buenos Aires el acuerdo que propicia apuntará a lograr que en 2015 la totalidad de los chicos de 3, 4 y 5 años de edad estén incluidos en el sistema público de educación inicial y a que “reduzcamos drásticamente la brecha norte- sur”.
