El jueves 7 de abril, a partir de la iniciativa de Consumidores Libres, se llevará a cabo un boicot a los supermercados “por los permanentes ajustes de precios que se están dando”.
“Los consumidores tenemos que decir basta y no ingresar a las grandes cadenas de supermercados ese día”, expresó a NU, Héctor Polino, referente de la asociación de defensa de los derechos de usuarios y consumidores. El exlegislador precisó además que “en la primera quincena de marzo el aumento de precios fue del 2,3 por ciento, y la suba acumulada desde enero es del 10,25 por ciento”.
Por lo que advirtió que “si se mantienen estos porcentajes, terminaremos el año con más del 50 por ciento de aumento, y el gobierno nacional no hace nada”. Además, respecto a la suba de la luz, indicó que “si existen tarifas subsidiadas desde hace 13 años, los consumidores lo adquieren como un derecho; entonces, no se puede sacar de un día para el otro el 100 por ciento”.
Acerca de la convocatoria para abril, el dirigente socialista explica: “Es una forma pacífica y efectiva de demostrar el descontento de la gente ante los aumentos. La idea no es afectar los niveles de ingresos de los supermercados, sino manifestar el estado de protesta de los consumidores frente a las permanentes remarcaciones de precios que tienen un alto componente especulativo”.
“El objetivo es que los consumidores dejen de comprar en los locales de las cadenas de todo el país para que el Estado, de una vez por todas, tome nota de esta insatisfacción”, señaló.
Además, agregó que el relevamiento que la asociación realiza en base a 38 artículos de primera necesidad arrojó un “aumento del 2,03 por ciento” en el último mes y estimó que, a este ritmo, la suba de la canasta básica llegará al “50 por ciento” a fin de año. “Todos coincidimos en que los precios no pueden seguir actualizándose todos los días”, refirió, por último, a NU.
