El debate por la despenalización de drogas que se gestó dentro del kirchnerismo, con la discusión entre funcionarios como Sergio Berni y Agustín Rosso, traspasó las barreras del partido y en el macrismo fue desde donde este martes dieron su opinión sobre el tema. Según indicaron sería “un retroceso” desde la “producción a la comercialización”. Estos dichos se contraponen a los del subsecretario de Seguridad, quien planteó llevarlo al terreno de la discusión.
Ésta y otras críticas formularon en la recorrida que realizaron por San Isidro, María Eugenia Vidal y Guillermo Montenegro, acompañados por el jefe de Gobierno. Según la candidata bonaerense, “no están dadas las condiciones para legalizarlas”.
“Hay mucha improvisación; en un tema como el narcotráfico no se puede hacerlo”, enfatizó.
A principio de semana, Berni y Rossi se cruzaron en declaraciones cuando el ministro de Defensa aseguró que la Argentina “es un país de producción y consumo de estupefacientes”. El representante de la cartera de Seguridad afirmó que “no hay consumo a gran escala”.
Con más críticas desde el macrismo, la diputada Silvia Majdalani señaló que “las contradicciones del Gobierno nacional son, además de muy preocupantes, el claro reflejo de cómo se manejan”.
Expresó que “en un país donde no están las fronteras radarizadas, donde las fuerzas que deberían cuidarlas están en la ciudad, donde no hay política, me parece que no estamos en condiciones de legalizar”.
Majdalani y los diputados Federico Pinedo, Pablo Tonelli, Patricia Bullrich, Christian Gribaudo, Eduardo Cáceres y Gisela Scaglia, presentaron un proyecto de ley para reclamar informes sobre “estadísticas y medidas oficiales adoptadas por el Poder Ejecutivo Nacional para combatir el narcotráfico en el país”.
