Para ir entrando en el clima electoral, Noticias Urbanas entrevistó en su oficina de San Telmo a Mariano Recalde, que encabeza la lista de precandidatos a legisladores de Unidad Ciudadana. Recalde competirá en las PASO contra las listas que encabezan, a su vez, Gustavo Vera (Honestidad y Coraje) y Jonathan Thea (Patria Grande). Entre todos componen el espacio Unidad Porteña.
“Hemos desarrollado una herramienta de construcción política, con la que nos disponemos a competir en una elección que servirá para evaluar la gestión del Gobierno que está hoy en el poder. Además, vamos a definir cómo queremos que sean los dos años que aún le quedan a Mauricio Macri, más aún sabiendo lo que van a hacer si ganan –que ya lo anticiparon–, que va a ser peor que lo que hicieron hasta ahora”, abre el fuego sin liviandad este abogado, que además fue presidente de Aerolíneas Argentinas.
Para delinear la imagen del Gobierno que está describiendo, Recalde trae a colación que en su campaña presidencial, Macri “prometió eliminar el Impuesto a las Ganancias, pero ahora lo pagan más trabajadores que antes. También prometieron que iban a lograr la Pobreza Cero y hay más pobres que antes”, subraya.
Luego, el precandidato a legislador porteño destacó que “es importante enviarle un mensaje a Mauricio Macri”. “Nosotros queremos ser la voz de aquellos a los que les desordenaron la vida. Hoy, a causa de las medidas económicas que decidió Cambiemos, la gente no sabe si conservará el trabajo, si llegará a fin de mes con el salario, si podrá comprar un auto o si tendrá un futuro.”
“Nuestro desafío para estas elecciones es también ser lo suficientemente claros para que no existan falsas opciones. Si alguien quiere votar contra Macri, la oposición no es Massa ni Lousteau, que le votaron todos los proyectos en la Cámara de Diputados y en la Legislatura. Votarlos a ellos sería perder el voto”, situó claramente su propuesta Recalde.
En cuanto a los problemas de la gente, el precandidato peronista reclamó: “Nos quieren imponer otra agenda, porque en esta elección no se eligen jueces, se evalúa a Macri y a su propuesta política y económica. Necesitamos un Gobierno que esté del lado de la gente y no de los ricos y de los grandes empresarios, que han sido hasta ahora los únicos beneficiados”.
–¿En qué problemas de la Ciudad le gustaría concentrarse?
–Los habitantes de la Ciudad tienen miedo a perder el trabajo, los comerciantes temen tener que cerrar sus negocios, no poder mantener sus estaurantes o sus pymes, no saben si llegan a fin de mes. Muchos en el sur están preocupados porque no tienen para pagar el boleto del colectivo. En la Ciudad hay cada vez más gente en la calle, porque, entre otras razones, no pueden pagar los alquileres. Hay desalojos, además, lo que agrava este problema, que es muy grave y está empezando a sentirse fuerte en la Ciudad. La gente nos dice que las cosas no van bien y que sienten que van a estar peor. De todos modos, en la Ciudad hay herramientas para ponerse del lado de la gente. Se podría, por lo pronto, asegurar una educación pública porque la mitad de la población debe sostener de su bolsillo, pagando escuelas privadas, la educación de sus hijos. Si bien existió en algún momento una mejor situación, en la que algunos podían permitirse pagar por ella, muchos de los que envían sus hijos a escuelas privadas lo hacen porque no hay oferta pública suficiente. Si le das a elegir a la gente entre una escuela pública de calidad y una educación privada de calidad, elegirían la primera. Por eso, la Ciudad necesita infraestructura educativa, más establecimientos, porque hacen falta.
–¿La inversión inmobiliaria en la Ciudad es suficiente?
–No. Es mayoritariamente especulativa. Es muy difícil para un porteño alquilar. Hay una enorme cantidad de viviendas ociosas, lo que tiene que ver con la especulación más que con una cuestión burocrática, como le escuché decir al jefe de Gobierno cuando anunciaba un plan de viviendas que es bueno para los inquilinos, pero insuficiente. Nosotros esto lo venimos empujando desde hace mucho tiempo, pero lo que propuso Larreta es un pequeño parche, en medio de los problemas que tienen los porteños. Nos hubiera gustado que tomara esta medida mucho antes, no en medio de un proceso electoral. Se debería impulsar, además, una ley que grave la vivienda ociosa para obligar a los propietarios a ponerlas en el mercado, porque eso baja los precios de los alquileres y da más opciones a los vecinos.
–Los problemas judiciales se han metido en la campaña electoral. ¿Con qué objetivo?
–Para empezar, debimos apelar una medida que solicitó Lousteau para que no usáramos el nombre Unidad Ciudadana, aunque nos termina de autorizar la Cámara a que lo usemos. Lo demás son operaciones.
–¿Cómo es el perfil de lo social en la Ciudad de Buenos Aires, teniendo en cuenta lo poco que se invierte en ese rubro?
–Es la ciudad más injusta del país. Es la que sufre mayor desigualdad. Es la que tiene mayor presupuesto, la que tiene mayor producto bruto per cápita, la que ofrece más oportunidades y la que tiene mayores desigualdades. Cuando se observan los indicadores, en general, parecen razonables, pero cuando se desagregan los de la zona norte y los de la zona sur, aparecen las desigualdades. Las cifras en la zona sur son comparables a las más duras de la Argentina. El desempleo, la mortalidad infantil, la tasa de delitos y la inseguridad son desconcertantes. A eso hay que sumarles el analfabetismo y la falta de vacantes escolares, que totalizan indicadores muy malos, muy distintos de los del norte de la Ciudad.
Finalmente, Recalde se mostró interesado en que “no se siga endeudando la Ciudad, que no se siga subejecutando el presupuesto”. Y culminó expresando: “Queremos que los recursos se distribuyan de manera diferente, porque hay que darles mayor prioridad a la educación y a la salud. También vamos a reclamar que haya una verdadera revolución en el transporte, y que no se siga vaciando el contenido de las palabras, como hizo Larreta en la Ciudad al anunciar esto último”.