Este lunes por la noche, se concretó la posibilidad de que María Eugenia Vidal negocie con Alternativa Federal, en especial con Sergio Massa, a fin de compartir la lista bonaerense, con el aval del Presidente.
Así podría la gobernadora colgar la boleta de la candidatura presidencial de Mauricio Macri y también de la del peronismo no K, aunque la chance queda habilitada para cualquiera.
Es que igualmente, habría un problema inminente: en abril Macri prohibió las colectoras por decreto (Decreto 259/19), el cual había sido apelado por casi toda la oposición y el expediente está en el escritorio de la jueza electoral María Servini de Cubría.
La decisión podría ser el final de una negociación interna en Cambiemos en la que jugó fuerte Vidal para presionar al macrismo. Más allá del éxito o no que pueda tener, en momentos en que Massa negocia al mismo tiempo con el kirchnerismo (Alberto Fernández ya le hizo pública la oferta para que compita en la PASO presidencial de Unidad Ciudadana), la apertura de esta vía da por sentadas algunas definiciones.
En este juego estaban ayer Juan Manuel Urtubey y Miguel Pichetto que insisten en convencer a Roberto Lavagna de avanzar con la tercera vía. Es que a Alternativa Federal le conviene la alianza con Cambiemos ya que no tiene candidato/a de peso en la Provincia de Buenos Aires, las arenas de la guerra madre.
