Por cuarto año consecutivo, el presidente ruso encabeza la lista de las personas más poderosas del mundo que elabora la revista norteamericana “Forbes”. La explicación que dieron los editores de la publicación es sencilla: “el líder ruso sigue consiguiendo lo que quiere”, señalaron en un comunicado.
El segundo lugar lo ocupa esta vez el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, que en los próximos años deberá negociar con Putin el surgimiento de una nueva realidad, que dejará paso a un mundo multipolar, en detrimento de la globalización vigente por estos días. El año pasado, cuando aún era un magnate de la construcción y comenzaba a competir por la presidencia de los EE.UU. figuraba en el puesto número 72 de la lista.
La tercera posición en el ranking la ocupa la declinante canciller alemana Angela Merkel, que perdió un escalón, ya que en 2015 se encontraba en el segundo lugar. El declive de este año se debe a múltiples razones, pero el golpe demoledor que significó el Brexit no debería ser ignorado, entre ellas.
El líder espiritual de una grey católica que agrupa a más de 1.300 millones de personas, el Papa Francisco, se encuentra en el quinto lugar del ranking. Así, permuta su ubicación con el líder chino Xi Jinping, que el año pasado estaba quinto y este año quedó en el cuarto lugar, la posición que el Papa ocupó el año pasado.
Como era de esperar, Barack Obama, que en 2015 figuraba en el tercer lugar, descendió directamente hasta el puesto 48º, empujado por el “Síndrome del Pato Rengo”.
En el sexto lugar se ubicó la poderosa titular de la Reserva Federal, Janet Yellen, que manejó este año un presupuesto de 1,15 billones de dólares, uno de los mayores del mundo.
Los últimos cuatro en la lista de los más poderosos del mundo incluyen al magnate de Microsoft, Bill Gates (7º); al creador de Google, Larry Page (8º); al primer ministro hindú, Narendra Modi (9º) y a otro emprendedor del mundo cibernético, el creador de Facebook, Mark Zuckerberg.
Como datos curiosos, los editores de Forbes incluyeron en la lista a dos chicos malos (para el mundo occidental), el líder de Daesch (ISIS), Abu Bakr al Bagadí (número 57) y el jefe de Al Qaeda, Ayman al-Zawahiri (número 71).
Para los argentinos, una de las inclusiones más conflictivas fue la del presidente de Uber, Travis Kalanick (en el número 64), el enemigo público número uno de los taxistas porteños y de otras ciudades del país.