Este viernes se cerró el coloquio de juezas y procuradoras de todo el mundo sobre trata de personas, que se realizó en la Academia de Ciencias Pontificias del Vaticano. Asimismo, se apuntó con un fuerte llamado a condenar con duras penas, similares a crímenes de lesa humanidad, a traficantes y colaboradores, a los proxenetas y también a clientes y consumidores, ya que son la causa principal del tráfico mismo. Durante la segunda jornada del encuentro, se representantes de la Argentina expusieron sus ideas, mientras que el jueves lo habían hecho otras 12.
Además, hubo una comitiva especial de la Ciudad, entre las que estuvo la jueza en lo Contencioso Administrativo y Tributario porteña, Elena Liberatori, mientras que también se destacó la presencia de la magistrada correntina Cristina Pozzer Penzo, ambas como observadoras.
El encuentro tuvo como resultado la firma de 24 puntos, entre los que se destaca que “en el acto de establecer la justicia, juezas, fiscales y colaboradores deben velar por restablecer la dignidad humana y garantizar la libertad de las víctimas ya sea por trabajo forzado, por prostitución, tráfico de órganos o explotación de mujeres con fines reproductivos”.
“Hay que condenar con las penas más severas, adecuadas a crímenes de condenar con las penas más severas adecuadas a crímenes de lesa humanidad, por la violación de sus Derechos Humanos, a los traficantes y sus colaboradores, a los proxenetas y sus colaboradores y también a los clientes y consumidores, que son la causa principal del tráfico mismo”, señaló el documento firmado. Y en cuanto a las víctimas se remarcó “el apoyo integral a largo plazo y sin limitaciones o condicionamientos”.
En el encuentro las argentinas que expusieron, en la segunda jornada del coloquio, fueron: la jueza Federal de Resistencia, Zunilda Niremperger; la fiscal Federal Paloma Ochoa; la magistrada del Tribunal Oral Federal número 2, Karina Rosario Perilli; una de las titulares de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), María Laura Roteta; la titular del Juzgado Federal número 1, María Servini de Cubría; y la integrante del Consejo de la Magistratura, Gabriela Vázquez. Después fueron exponiendo la jueza del Tribunal Oral en lo Criminal número 6 de Lomas de Zamora, María Laura Altamiranda; la Asesora Tutelar de Adjunta de Menores de la ciudad de Buenos Aires, María de los Ángeles Baliero de Burundarena; la jueza de la Sala II de la Cámara de Federal de Apelaciones de La Plata, Olga Calitri; y la presidenta de la Sala II de la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal, María Claudia Caputi.
La encargada de abrir el encuentro el jueves fue la presidenta de la Asociación de Mujeres Jueces de la Argentina, Susana Medina, quien participó de la organización del coloquio y acercó a muchas de las expositoras tanto de Argentina como del extranjero.
Por la tarde de ese mismo día fue el turno de la jueza de la Cámara de Casación Penal Federal Ana María Figueroa; la ministra de la Corte Suprema de Santa Fe, María Angélica Gastaldi, la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó; la presidenta de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Electoral y jueza de la Cámara Comercial porteña, María Lilia Gómez Alonso; la ministra del Superior Tribunal de Justicia de Misiones y vicepresidenta de la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina, Cristina Leiva; la titular de la Fiscalía en lo Criminal y Correccional Federal número 12 de la Capital Federal y cotitular de la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX), Alejandra Mángano; y la fiscal Federal de Mar del Plata, Laura Mazzaferri.
Por último, el legislador porteño de Bien Común y titular de La Alameda, quien se desempeñó como Observador del Coloquio, al igual que otras 21 juezas y fiscales del país, destacó el primer día del encuentro.