Randazzo sufre el primer “portazo” por parte de Stolbizer

Randazzo sufre el primer “portazo” por parte de Stolbizer

En medio de la carrera de sumatoria de apoyo de Randazzo para su potencial candidatura con miras a octubre, corrieron rumores acerca de querer sumar al FR. Sin embargo, Stolbizer salió a desmentirlo.


El exministro de Transporte, Florencio Randazzo, se encuentra en una etapa previa a candidatearse, donde busca sumar todo el respaldo posible para enfrentar las urnas en las próximas elecciones de octubre. Omar Perotti, Rodolfo Urtubey, Juan Manuel Abal Medina, Pedro Guastavino, Carlos Espínola, Julio Catalán Magni, Mario Pais y Miguel Ángel Pichetto son nombres que aparece en la lista de “conquista” del exfuncionario, a la cual se ha sumado recientemente Fernando “Chino” Navarro, líder del Movimiento Evita.

Sin embargo, había comenzado a correr el rumor de que el líder de “La Florería” pretendía sumar a su línea al Frente Renovador que, aunque difirieran en líneas políticas, sumaba peso al armado de una oposición electoral.

Pero no. La diputada nacional Margarita Stolbizer salió a descartar los rumores que ubicaban a Randazzo cerca de un acuerdo con el massismo, y le cerró la puerta: “Hay una fantasía sobre la unidad del PJ que no se compadece con la realidad, porque hace más de 15 años que no va junto y no volverá a ir unido. No lo veo factible, nunca hablé con Massa de esta posibilidad”.

Desde la vereda de enfrente, también desde el entorno de Randazzo se descarta la posibilidad de sumarse al Frente Renovador, y mucho menos de salir del Partido Justicialista, aunque sí se mantiene la idea de jugar fuera de los límites del kirchnerismo.

Y, a propósito del Día Internacional del Trabajador, Stolbizer y Sergio Massa publicaron en sus cuentas de Facebook una carta en e piden fomentar la cultura del trabajo e “incluir a los que están afuera” y deslizan la importancia de que aprueben el proyecto de Massa para eliminar el IVA, lo cual disminuiría el sistema de tarifas. Aquí, el texto completo:

Hoy, como dirigentes de este país, tenemos la obligación de defender esos sueños.

Tenemos que aportar ideas para incorporar al trabajo a los que están afuera, transformando sus planes sociales en planes de empleo.

Tenemos que romper la dependencia del puntero, del Estado, de los que los usan políticamente, capacitándolos y preparándolos para el mundo del siglo 21.

Y tenemos un presente agobiado por carencias y necesidades. Una urgencia que no admite peleas entre un pasado manchado por corrupción y una promesa de futuro que se posterga cada 6 meses.

La pelea más importante que tenemos que dar los dirigentes es la pelea por el bolsillo de nuestros trabajadores.

Es el hoy. Y hoy no hay un solo indicador económico que nos permita ser optimistas: inflación descontrolada, endeudamiento, caída del consumo, desempleo y aumento de pobreza e indigencia.

La economía tiene que servir para solucionar los problemas reales de la gente y no para potenciar los negocios de amigos ricos o los de la bicicleta financiera de siempre.

El trabajo, la educación y la producción deben ser los motores de nuestro país. Con jubilaciones dignas, que le permitan a nuestros mayores comer y curarse, sin tener que mendigar.

Queremos que los alimentos no paguen más IVA y lo queremos ya, porque la gente no puede seguir esperando.

Que no te roben más tu sueldo y tu trabajo cuatro vivos que intermedian y un Estado que los asfixia.

Las leyes que proponemos reducen los impuestos para bajar los precios de los productos básicos. Hagamos la prueba. Hagamos el intento. Bajemos los precios. 

Son casi 500 pesos más en el bolsillo de cada jubilado y más de 1000 pesos en el de cada trabajador.

Es una gran forma de defender el trabajo y, sobre todo, la cultura del trabajo. 

En este Día del Trabajador, bajemos los precios para defender el salario de los argentinos.

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