La jueza porteña María Gabriela López Iñíguez defendió este lunes el operativo de desalojo del asentamiento Papa Francisco de Villa Lugano y advirtió sobre una nueva ocupación del predio si no se concretan “acciones inmediatas” para iniciar el saneamiento del lugar.
En un comunicado difundido por el Departamento de Información del Poder Judicial porteño, la magistrada hizo un relato cronológico del procedimiento de liberación de los terrenos de avenida Francisco de la Cruz y Pola, y destacó la “actuación coordinada” de los efectivos de Policía Metropolitana y la Gendarmería Nacional. Según la titular del juzgado Nº 14 en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad, el allanamiento a los terrenos de avenida Francisco de la Cruz y Pola fue “exitoso” y se concretó “sin pérdidas humanas que lamentar ni heridos de consideración”.
La jueza López Iñíguez informó que se reunió este lunes con su par Elena Liberatori, a cargo del expediente contencioso-administrativo sobre el saneamiento del terreno liberado el fin de semana, y le notificó que el gobierno porteño “se encuentra nuevamente en plena y libre posesión del predio cuya restitución venían reclamando judicialmente”. La magistrada insistió en reclamar que se inicien de “inmediato, y con la mayor celeridad, las tareas de saneamiento en el marco de la ley 1770”, al advertir que “dejar el predio nuevamente abandonado, con una custodia policial que no podrá ser mantenida eternamente, expone al lote, dada su ubicación, al riesgo cierto y grave de ser nuevamente intrusado”.
Asimismo, aseguró que “de ocurrir, será exclusiva responsabilidad del Poder Ejecutivo local, y podría dar lugar, incluso, a responsabilidades penales a su respecto”.
La jueza López Iñíguez agradeció la intervención en el tema de la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, la Policía Metropolitana, el SAME y los ministerios de Desarrollo Social porteño y de la Nación.