“Estamos muy orgullosos del equipo que hemos conformado. El PRO ha crecido mucho en Santa Fe; asumirán en diciembre muchos intendentes, concejales, presidentes comunales y diputados provinciales. Y estoy muy feliz por este logro”, aseguró el ex candidato a gobernador de Santa Fe por el PRO, Miguel del Sel.
Así es el resto de su declaración:
Peleamos contra un gobierno provincial muy fuerte, y peleamos también contra las intendencias de Rosario, Santa Fe, entre otras. El resultado nos llena de orgullo. Fue David contra Goliat, y terminamos cabeza a cabeza.
Han sido años maravillosos que jamás olvidaré. Encontré un pueblo triste y cansado, pero con muchas ganas de cambiar. Un pueblo convencido de que no hay que resignarse, de que es posible vivir mejor. Estoy con el corazón repleto de cariño, especialmente de los que menos tienen, de los que más sufren, de los olvidados.
Previo a las PASO advertimos de las inconsistencias que observábamos en el proceso electoral. Formulamos pedidos para que se regularice la designación de autoridades de mesa, se permita ejercer el derecho de voto a las fuerzas de seguridad, se informe acerca de la trazabilidad de los telegramas, y sugerimos numerosas medidas en orden a garantizar la transparencia y certeza del resultado del proceso electoral. Lamentablemente ninguno fue escuchado.
Como era de esperar, el escrutinio provisorio concluyó en un escándalo público, que derivó en la salida de un importante funcionario del gobierno provincial. Teníamos la esperanza de que el proceso eleccionario en las generales no presente las mismas dudas que el provisorio, pero lamentablemente no fue así. Las cientos de irregularidades que fuimos descubriendo nos obligó a exigir al Tribunal Electoral la apertura de todas las urnas. Creíamos, y aún lo creemos, que era la única manera de dar tranquilidad a los santafesinos, y legitimidad al vencedor. Pese a que el Tribunal manifestó que serían flexibles en el criterio de apertura de urnas, la realidad evidenció todo lo contrario. Las urnas correspondientes a ciudades favorables al socialismo se abrieron con mayor facilidad que en aquellas zonas que nos eran favorables.
Tampoco se dejó votar a gran parte de la fuerza policial. Durante toda la campaña escuchamos hablar de dignificar a esa fuerza. No permitirles votar es, desde el vamos, no hacerlo. Santa Fe se ha vuelto tan paradójica que los presos pueden votar, pero los policías no.
Luego de debatirlo con mi equipo hemos tomado la decisión de no judicializar la decisión del Tribunal Electoral. Vamos a aceptarla para poner un punto final a esto y seguir adelante.
Le deseo a Miguel Lifschitz todo el éxito del mundo en esta nueva etapa que comienza. Tiene por delante la enorme labor de solucionar los problemas de los santafesinos. Luchar contra el narcotráfico, que ha tomado nuestras ciudades; combatir la inseguridad, que gana cada día más terreno; terminar con la falta de infraestructura básica, que tiene tristes a tantos miles de santafesinos.
Voy a seguir trabajando por mi provincia, y acompañando a los que menos tienen. Voy a seguir luchando por su dignidad, por su fe, y por su esperanza inquebrantable. Seguiré acompañando a Mauricio en su sueño de cambio. Estoy convencido de que no nos podemos resignar a vivir así, y no lo vamos a hacer. Conozco el corazón de los argentinos, y sé muy bien que ya eligieron. Eligieron la dignidad, la verdad y la esperanza. Por eso el cambio es imparable, porque viene desde el corazón de nuestro pueblo.