En la previa de los anuncios económicos del lunes, cuando estuvieron juntos, Martín Guzmán le transmitió su optimismo al presidente Alberto Fernández y le dijo: “Cuando vuelva de Washington nos sentamos a conversar con todos. La ley va a salir”.
Según el diario La Nación, el ministro de Economía le dijo al Presidente que el impuesto a la “renta inesperada” será aprobada en el Congreso y él se comprometió a convencer a los dirigentes opositores para que acompañen la iniciativa.
La duda sobre la aprobación parlamentaria del nuevo impuesto, con casi $200.000 millones que serán destinados a esos sectores “afectados” por la inflación, sigue sobrevolando en los despachos del Poder Ejecutivo. Desde la Casa Rosada, y más allá del fracaso en la discusión del Presupuesto el año pasado, confían en las gestiones de Guzmán, y otros actores, como el jefe de gabinete, Juan Manzur, que permitan conseguir el apoyo suficiente para convertir el borrador en ley en las próximas semanas.
Fuentes cercanas al jefe de Gabinete, Juan Manzur, le dijeron al diario La Nación: “El ministro anunció el proyecto, y vamos a trabajar para lograrlo. Haremos el esfuerzo, igual que lo hicimos con el Presupuesto”. Además aseguraron que confían en su diálogo con “todos” los gobernadores (incluidos los de Juntos por el Cambio) para arrimar el apoyo de distintas voluntades, aún por fuera del conglomerado oficialista. La misión es difícil: Horacio Rodríguez Larreta ya advirtió que no avalarán ningún nuevo impuesto.
El razonamiento de Guzmán, según fuentes cercanas, fue primero anunciar que iba a enviar el proyecto, pero no hacerlo sin consulta previa, “sentarse, discutir, escuchar a todo el mundo” para “tener más chances de que salga” en un Congreso donde el Frente de Todos, aún con la hipótesis de la unidad, no cuenta con mayorías propias para aprobar los proyectos en ambas cámaras.
“Martín tiene un estilo diferente a otros, para algunos es un estilo tibio pero que le viene saliendo. Y el Presidente lo banca mucho en eso”, contestaron desde un despacho importante de la Casa Rosada.
▶ Charlas con empresas y gremios
El ministro de Economía ya anunció que la semana próxima se reunirá con las contadas empresas que oficiarían de “aportantes”, además de consultar con los gremios.
“Es una renta muy fácil de medir porque es un momento particular que beneficia a unos pocos”, dijeron quienes escucharon al ministro, que afirma que propuestas similares están hoy en planes del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y del gobierno de Alemania que encabeza el socialdemócrata Olaf Scholz.
“No les va a quedar demasiada escapatoria para votarlo”, dicen en el Gobierno en referencia al cristinismo, que en teoría “debería coincidir ideológicamente” con el aporte de grandes empresas para los afectados por la inflación. “
“Hay necesidad de parar la locura de que las cosas se debatan primero por los medios y no obtener resultados”, dijeron desde Balcarce 50, confiados en aprobar la medida, a pesar del temprano rechazo de líderes de la oposición, como Larreta.