Por el conflicto con los fondos buitre, el país recibió mediante dos comunicados, el apoyo de los países que integran el Mercosur y la CELAC.
Allí, los países integrantes expresan su “absoluto rechazo a la actitud de dichos Fondos, cuyo accionar obstaculiza el logro de acuerdos definitivos entre deudores y acreedores y pone en riesgo la estabilidad financiera”.
Los mandatarios del Mercosur reconocen “la vocación de la República Argentina de continuar honrando sus compromisos financieros internacionales, tal como lo viene haciendo sistemáticamente desde la reestructuración de su deuda en los años 2005 y 2010, donde se obtuvo el acuerdo de más del 92% de sus acreedores”.
En el mismo comunicado, los países del Mercosur expresan “su solidaridad y apoyo a la República Argentina en la búsqueda de una solución que no comprometa su desarrollo y el bienestar de su pueblo, en consonancia con sus políticas de desarrollo nacional”.
“Consideramos indispensable para la estabilidad y predictibilidad de la arquitectura financiera internacional, garantizar que los acuerdos alcanzados entre deudores y acreedores en el marco de los procesos de reestructuración de las deudas soberanas sean respetados, permitiendo que los flujos de pago sean distribuidos a los acreedores cooperativos según acordado con los mismos en el proceso de readecuación consensual de la deuda”, señalan los países de la CELAC.