La Corte Suprema de los Estados Unidos rechazó el pedido de la Argentina para que intervenga en el juicio entre el país y holdouts y revise los fallos adversos de primera y segunda instancia que obligan al pago de 1.330 millones de dólares, informaron esta mañana medios especializados norteamericanos.
El máximo tribunal judicial americano se había reunido el jueves en Washington y postergó hasta hoy la comunicación oficial sobre su determinación, que resultó desfavorable a los intereses argentinos, a pesar de que en las últimas horas había cobrado fuerza la versión de que la Corte pediría una nueva opinión al Gobierno de Barack Obama.
Con esta decisión, la única desfavorable frente a otras dos más beneficiosas para la Argentina que podría haber adoptado la Corte, la Argentina tendría que pagar antes del 30 de junio unos 1.330 millones de dólares a tenedores de bonos en default.