El Servicio Federal de Seguridad (FSB) ruso ha llevado a cabo una operación especial a gran escala contra representantes de los testigos de Jehová, asociación religiosa prohibida en el país desde 2017. El operativo se realizó en Moscú y en otras regiones de Rusia.
De acuerdo con un comunicado del Comité de Investigación de Rusia, una división de la organización prohibida ha estado operando en el noreste de la capital rusa desde julio de 2019. En las reuniones se estudió literatura religiosa y se promovieron las enseñanzas de la secta. Asimismo, representantes de la organización participaron en la contratación de nuevos adeptos en todo el país.
El video del registro del apartamento, usado por los testigos de Jehová como una sede en Moscú, fue publicado por el Comité de Investigación. En la grabación se ve cómo los agentes del FSB ingresan en el apartamento, detienen a los miembros de la organización e incautan sus materiales y dinero.