El diputado de Juntos por el Cambio (JxC), Diego Santilli, presentó un proyecto de ley de “Sistema de Responsabilidad Penal Juvenil” que propone bajar la edad de imputabilidad en delitos violentos de 16 a 15 años.
El objetivo del proyecto es revertir “los efectos del delito en la sociedad”. Para poder lograrlo se prevé que los adolescentes que cometan los delitos “se hagan responsables” de sus actos y reparen los daños ocasionados.
En los detalles de la iniciativa, Santilli propone que en vez de que la única consecuencia para el delito sea la cárcel, que los adolescentes además realicen todas las medidas posibles para reparar los daños producidos. Asimismo, las víctimas y las comunidades que fueron perjudicadas tendrán derecho a participar en todo el proceso, con márgenes amplios de acción y participación, pudiendo proponer modos de reparación.
El diputado opositor expresa que el castigo y la reparación son parte integral de un sistema de responsabilidad penal juvenil y que, por ello, si las medidas de reparación impuestas son incumplidas o fracasan por parte de la persona que delinquió, las autoridades judiciales puedan disponer las penas privativas de libertad, que pueden ser de hasta 10 años de prisión, a excepción de los casos de homicidio y abuso sexual agravado, que el máximo de la pena es de 15 años, en razón de la gravedad de los delitos.
El proyecto de Santilli apuesta a que los juicios contra los adolescentes se resuelvan en el plazo máximo de dos años y, en caso de que el tiempo pase y que el proceso llegue a su resolución, constituirá una falta grave para las autoridades judiciales. El objetivo de este “castigo” es evitar que se “cajoneen” las causas, estableciendo responsabilidades claras.
La iniciativa cuenta con el aval y las firmas de los diputados opositores Rogelio Frigerio, Waldo Wolff, Ricardo López Murphy, Graciela Ocaña, Álvaro González y Fernando Iglesias.
¿Qué sucederá si aprueban el proyecto?
En caso de que aprueben el proyecto, se buscará evitar la saturación del sistema penal mediante la creación de un fuero especializado de justicia penal juvenil, con el objetivo de descomprimir el trabajo de los tribunales penales y permitir llegar más rápido a la finalización de los juicios.
El diputado nacional, además, propone la desjudicialización de los procesos penales, lo que permitirá al Estado contar, como primera respuesta al delito, con diferentes medidas socioeducativas, que deberán realizarse bajo el marco de un “abordaje restaurativo, entendido como un proceso en el que todas las partes implicadas en un conflicto (ofensor, víctima y comunidad) resuelven colectivamente cómo manejar las consecuencias del delito y sus implicaciones para el futuro”.
“El proyecto se inserta en una idea republicana y democrática del derecho penal, pero que tiene en cuenta las desigualdades existentes entre las personas y, por ende, que la respuesta punitiva por sí misma no es posible sin entender esas desigualdades”, declaró Santilli.