El ministro de Desarrollo Productivo de la Nación, Daniel Scioli, mantuvo su primera reunión con representantes de cadenas de supermercados nucleados en la Asociación Supermercados Unidos (ASU).
En la mesa se sentó el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica de la provincia de Buenos Aires, Augusto Costa, uno de los funcionarios del gobierno con mayor recorrido en lo que hace al control de precios y vínculo con el sector.
En tándem, ambos ministros pidieron a los supermercados “garantizar el abastecimiento de productos en góndola y establecer un sendero de estabilidad respecto a los precios”. Scioli, busca así, respaldo político del kirchnerismo en lo que hace su gestión y participación en “la guerra contra la inflación”, que había decretado el presidente Alberto Fernández tiempo atrás.
A días de asumir, Scioli fue hasta su antiguo despacho en la gobernación bonaerense y mantuvo una reunión con el mandatario bonaerense, Axel Kicillof, y Costa. Allí acordaron trabajar en una agenda en común. La cuestión de precios y la facturación de las grandes empresas alimenticias es seguida de cerca por Kicillof y por su ministro. También, claro, por Cristina Kirchner. Ambos, durante el gobierno de CFK, fueron los impulsores del programa Precios Cuidados, cuando Kicillof era ministro de Economía y Costa secretario de Comercio Interior.
Antes de reunirse con representantes de los hiper y supermercados, Scioli y Costa, junto al ministro de Cultura de la Nación, Tristán Bauer, encabezaron la Mesa de la Industria de E-gaming y Videojuegos, donde se evaluaron los avances de la política de promoción que ha llevado adelante la cartera productiva y se exploraron posibilidades de crecimiento local en dos actividades de la Economía del Conocimiento que facturaron en conjunto a nivel global 176.000 millones de dólares en 2021. Por ahora, la dupla Scioli-Costa se mueve en sintonía.
Scioli por ahora busca garantizar el trabajo en conjunto tanto con la nueva ministra de Economía, Silvina Batakis, como con la gestión bonaerense, signada por el kirchnerismo.
El plan de Scioli es que la provincia de Buenos Aires intervenga y preste su estructura en los operativos de control de precios como venía haciéndolo durante la gestión de Roberto Feletti, para luego “girar” el resultado de dichas acciones a la administración nacional. Control de precios y abastecimiento.
Es que los últimos relevamientos realizados por la cartera de Costa en distintos distritos evidenciaron irregularidades en el traslado de mercadería y abastecimiento en la mayoría de los grandes super e hipermercados bonaerenses.
El mes pasado, junto a la Agencia de Recaudación de Buenos Aires (ARBA), el gobierno bonaerense puso a 200 agentes en acción para controlar la cadena de distribución, venta mayorista y minorista de supermercados, que incluye a las 15 principales empresas del sector (La Anónima, Toledo, Coto, Nini, Makro, Cencosud, Carrefour, Changomás y Cooperativa Obrera, entre otras).
Allí se evidenciaron infracciones en el 23% de los camiones que transportaban mercadería en supermercados. En el marco de aquellos controles, ARBA había controlado 167 camiones (de los cuales se terminaron secuestrando siete unidades por falta total de documentación respaldatoria), se labraron 39 actas y se detectó mercadería en infracción equivalente a unos 70 millones de pesos.
En el encuentro de este martes estuvieron presentes el CEO de Coto, Guillermo Calcagno; el CEO de Carrefour, Pablo Lorenzo; el CEO de Cencosud, Alejandro Arruiz; el director de Asuntos Corporativos de Changomás, Juan Pablo Quiroga; el gerente General de La Anónima, Nicolás Braun; el director de Asuntos Corporativos de Día, Martín Álvarez Espíndola; el CEO de Toledo, Bernabé Toledo; y el director Ejecutivo de la Asociación Supermercados Unidos (ASU), Juan Vasco Martí.