Mientras que las tomas continúan en varios colegios porteños, un grupo de estudiantes realizó destrozos en la Iglesia San Ignacio de Loyola, vecina del Colegio Nacional Buenos Aires.
Luego de conocidos los hechos, la Asamblea del Nacional Buenos Aires repudió los destrozos y se desligó de ellos, abduciendo que “su objetivo es desprestigiar una lucha ejemplar del movimiento estudiantil contra una contra-reforma educativa de claro contenido reaccionario”.
“Denunciamos que detrás de esta acción lumpen se esconde la mano de agrupaciones que se han opuesto a la toma, y que por sus vínculos políticos están interesados en su fracaso, para hacer pasar la contra reforma impulsada por el gobierno Nacional y de la Ciudad. Por eso alertamos con que serán éstos los que querrán valerse de este hecho producido de espaldas al movimiento estudiantil para desprestigiar nuestra lucha.
La acción vandálica se produce luego de que ocurriera un hecho extraordinariamente positivo. Nos referimos a la asamblea de padres que se solidarizó con nuestra lucha, lo cual fue ampliamente difundido por los medios de comunicación”, continúa el comunicado.
Juan Manuel Cuello, uno de los alumnos del Centro de Estudiante, reconoció que entre el alumnado conocen la identidad de quienes realizaron los destrozos, pero que “la asamblea decidió no dar los nombres”.
“La acción contra la Iglesia de San Ignacio de Loyola es, por lo tanto, una violación artera de la democracia estudiantil que tan celosamente defendemos”, agrega el comunicado aprobado por más de 400 estudiantes. Por último, llaman a “continuar la movilización por la no aplicación de la Ley Nacional de Educación a todo el movimiento estudiantil, docente y de los padres”.