Según un comunicado divulgado por el ministerio de Asuntos Exteriores y emitido por un portavoz del Gobierno de la conservadora Theresa May, Rogers renuncia como representante permanente del Reino Unido para el bloque comunitario “unos cuantos meses antes” de su marcha, prevista para el próximo noviembre.
La nota agrega que el diplomático “ha tomado ahora esta decisión a fin de permitir que se nombre un sucesor antes de que el Reino Unido active el Artículo 50, antes de finales de marzo”.
El Gobierno británico agradeció también el “trabajo y compromiso mostrado durante los últimos tres años” por Rogers, nombrado a finales de 2013 por el exprimer ministro británico David Cameron y de quien se esperaba que fuera a desempeñar un papel clave en las negociaciones del Brexit.
La dimisión se produce unos quince días después de que originara una sonada polémica al afirmar que llevaría una década cerrar un acuerdo comercial entre el Reino Unido y la UE tras el Brexit.
El pasado 15 de diciembre, la cadena pública BBC reveló que, en un encuentro privado, Rogers había advertido al Ejecutivo de May acerca del actual consenso europeo, según el cual un acuerdo de libre comercio entre ambas partes no podría materializarse, como muy pronto, hasta 2025.
En esa conversación, Rogers alertó además de que el acuerdo podría incluso fracasar puesto que debía pasar antes por la ratificación de los restantes 27 miembros de la UE.
El diplomático fue uno de los principales asesores de Cameron en las negociaciones previas al histórico referendo europeo del pasado 23 de junio para lograr modificar los términos del encaje británico dentro del bloque común.
Esas negociaciones se saldaron con concesiones a Londres por parte de los 27 en lo tocante al acceso de los comunitarios al sistema de subsidios sociales británicos, pero los británicos votaron finalmente por marcharse de la UE.
El diario económico FT hizo referencia, por su parte, a un enfriamiento en los últimos meses en la relación entre Rogers y el equipo de la jefa del Ejecutivo británico.
Según ese periódico, Rogers estaba bien valorado por los demás embajadores de la UE, que esperaban que el funcionario continuara en su puesto durante el proceso negociador para la salida británica del bloque comunitario.
El anuncio de su marcha ha sido bien recibido por los que abogan por un acuerdo de “brexit duro”, en el que reine el control de la inmigración por encima del acceso al mercado único.
Así, Theresa May ha señalado que planea revelar este mes más detalles sobre su estrategia negociadora con Bruselas después de que su mutismo sobre el ‘brexit’ haya suscitado críticas de diferentes sectores.
Se prevé que el Reino Unido quedará desvinculado de la Unión Europea en la primavera de 2019.