En las vísperas del cierre de listas para las elecciones presidenciales en Venezuela, y con el vínculo bilateral entre el gobierno de Nicolás Maduro y el de Javier Milei tensado al máximo, seis dirigentes opositores al régimen, vinculados con la frustrada candidata María Corina Machado, pidieron asilo diplomático en la sede de la embajada argentina en Caracas.
La oficina de prensa del Presidente emitió un comunicado en el que confirmó la presencia de los dirigentes opositores. “Con el respaldo de la inviolabilidad consagrada en el artículo 22 de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, de la cual Argentina y Venezuela son signatarias, ha acogido a líderes políticos de la oposición en la residencia oficial de la embajada argentina en Caracas”, dice el comunicado en su párrafo principal.
En principio, la información había sido transmitida el lunes por la tarde por un periodista venezolano, Miguel Salazar. En su posteo de la red X, Salazar dio cuenta de que “Magalí Meda, Claudia Macero, Humberto Villalobos, Pedro Urruchurtu y Omar González (todos con privativa de libertad) se encuentran refugiados en la Embajada de Argentina en Caracas”.
Los seis dirigentes estarían en la amplia residencia destinada al embajador argentino, hoy vacante, y alejada de la sede administrativa, un dato que luego confirmó el comunicado oficial, que curiosamente no fue redactado por la Cancillería sino por la oficina presidencial.
El comunicado oficial condena el “hostigamiento y la persecución” contra opositores del régimen “socialista” de Maduro, y hasta denuncia la mano del chavismo en un corte de luz producido justamente en la residencia oficial, y advirtió sobre “cualquier acción deliberada que ponga en peligro la seguridad del personal diplomático argentino y de los ciudadanos venezolanos bajo su protección”.
Los seis dirigentes son los colaboradores más cercanos de María Corina Machado, la principal opositora a Maduro, impedida por vía judicial de presentarse en las elecciones de finales de julio, en la que él buscará un nuevo mandato. Urruchurtu, por caso, es el coordinador de asuntos internacionales del partido opositor Vente Venezuela, que encabeza Machado y que ya designó a Corina Yoris como su candidata presidencial.
Las relaciones entre Argentina y Venezuela pasan por uno de sus peores momentos desde que Milei asumió la Presidencia. Uno de los últimos episodios fue la prohibición para los aviones argentinos de surcar espacio aéreo venezolano, en represalia por el decomiso hacia Estados Unidos del avión de Emtrasur, retenido en Ezeiza durante meses por orden del juez Federico Villena, al igual que su tripulación compuesta por venezolanos e iraníes.
La embajada argentina en Venezuela, sin embajador previsto, está encabezada por el encargado de Negocios interino y diplomático de carrera Gabriel Volpi, luego de varios años de indudable cercanía entre Maduro y el kirchnerismo, representada por el embajador anterior, Oscar Laborde. Antes de que Laborde llegara a Caracas, el encargado de Negocios, Eduardo Porretti, fue “congelado” por la administración de Alberto Fernández, y luego desplazado.
Desde la oposición venezolano se repiten las críticas contra Maduro, a quien acusan de amañar el proceso electoral con el fin de complicar las chances de la oposición.
— Oficina del Presidente (@OPRArgentina) March 26, 2024
Maduro le cortó la luz a la embajada argentina
Luego de que la embajada argentina en Caracas refugiara a seis opositores al régimen de Nicolás Maduro, el gobierno de Venezuela, lejos de responder desde la diplomacia, decidió cortarle el suministro de energía eléctrica a la residencia que, sin embajador designado, está a cargo del encargado de Negocios interino Gabriel Volpi. La acción estuvo a cargo de un grupo de tareas que directamente arrancó los fusibles de la luz.
Así lo denunció el gobierno argentino a través de un comunicado emitido por la Oficina del Presidente: “La República Argentina manifiesta su preocupación por el incidente ocurrido ayer, que resultó en la interrupción del suministro eléctrico en la residencia oficial en Caracas, y advierte al gobierno de Venezuela sobre cualquier acción deliberada que ponga en peligro la seguridad de personal diplomático argentino y de los ciudadanos venezolanos bajo protección, recordando la obligación del Estado receptor de salvaguardar las instalaciones de la misión diplomática contra intrusiones o daños y preservar la tranquilidad y dignidad de la misma”.
No es la primera vez que el régimen de Maduro recurre a estas prácticas contra embajadas en su país. Entre otros ataques, en 2020 el gobierno de Francia denunció hostilidades hacia su residencia diplomática de Caracas que incluyeron el corte del gas y la electricidad.
Javier Milei apeló al artículo 22 de la Convención de Viena para exigir al régimen populista que respete las normas de convivencia entre dos estados que mantienen vínculos diplomáticos.