“Cuando fuimos a jugar a Formosa me impactó mucho porque fuimos a un hotel 5 estrellas, pero la pobreza que hay en la zona es muy grande”, soltó Carlos Tévez a lo largo de una extensa entrevista brindada la semana pasada al canal América, que nunca debe haber imaginado las fuertes repercusiones que generaron en el mundo de la política.
Durante el fin de semana, las primeras respuestas le llegaron desde Formosa. “Villerito europeizado”, le dedicó un funcionario de la jefatura de Gabinete provincial a través de las redes sociales, entre otros improperios, mientras que el gobernador Gildo Insfrán aseveró que “los porteños se creen europeos en el exilio”.
Sin embargo, este lunes las réplicas se nacionalizaron. En el seno del kirchnerismo la cosa estuvo dividida. Y para sorpresa de muchos, mientras el candidato presidencial Daniel Scioli optó por hacer una férrea defensa de Insfrán, el jefe de Gabinete Aníbal Fernández eligió la mesura.
“He visto las obras y el progreso, los avances de Formosa. Obviamente hay cosas para mejorar, como lo hay también en la ciudad de Buenos Aires. ¿O no hay hoteles 5 estrellas y tenemos villas por todos lados?. Hay problemas, como los hay también en la provincia de Buenos Aires. Siempre hay cosas para mejorar”, señaló Scioli en declaraciones a radio Mitre, que de todos modos dijo tener “cariño” por el 10 de Boca.
Por su parte, el jefe de Ministros y candidato a gobernador bonaerense prefirió no polemizar con “el jugador del pueblo” y pronunció, muy político: “No voy a hacer ninguna apreciación al respecto. Es bueno resaltar a alguien que no se olvida de sus orígenes”.
En tanto, más jugado, el candidato presidencial de Cambiemos y jefe de Gobierno porteño saliente, Mauricio Macri, publicó este domingo en su cuenta de Facebook un mensaje de solidaridad con Tévez, a quien le mandó “un fuerte abrazo”. “Carlitos no se merece esto”, lo tituló.