El macrismo presentaría un proyecto –que aún no entró a la Legislatura porteña- con el que busca declarar al servicio de subtes como “”público” y “esencial”, con lo cual podría alterar el derecho de huelga sobre dicha prestación, de la cual se hará cargo a partir del primero de enero de 2013.
Al conocerse esa noticia, el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, salió al cruce y expresó que “creo que es un servicio importante, nadie puede negar su importancia, pero no es un servicio esencial en el sentido técnico que usa la Organización Internacional del Trabajo (OIT), porque hay otros medios para desplazarse, no es que se impide ello absolutamente”.
El ex candidato a vicejefe porteño subrayó que “nosotros venimos manejando esta situación durante ocho años, en circunstancias muy complejas debido al conflicto intersindical. Hemos tenido huelgas que tuvimos que administrar y encontrado soluciones alternativas”.
“Yo creo que es posible manejarlo sin apelar a lo que claramente es una intención de impedir el ejercicio de huelga”, agregó Tomada en radio Del Plata.
De aprobarse la propuesta del macrismo, el derecho de huelga quedaría limitado y obligaría a los trabajadores a garantizar el 90 por ciento de los viajes en horas pico y el 60 en horarios normales.