Una docena mandatarios y la cúpula de la central sindical mantuvieron una cumbre en la sede del Consejo Federal de Inversiones (CFI) y analizaron durante tres horas el estado de situación del PJ, luego del anuncio de no presentarse como candidata de Cristina Kirchner.
Se trató del primer encuentro que se lleva a cabo en este sentido y se anticipó que la semana próxima habrá otro en el que se sumarán más actores del peronismo, como Intendentes y dirigentes de movimientos sociales.
“No hablamos todavía de candidatos, hablamos de reordenamiento del peronismo y que tenga fuerza de reacción, en eso estamos empeñados. Hay que debatir porque el peronismo tiene posibilidades de ganar el año que viene”, dijo a la salida del encuentro el referente de la CGT y titular de UPCN, Andrés Rodríguez.
Participaron de la reunión: Axel Kicillof (Buenos Aires); Ricardo Quintela (La Rioja); Sergio Ziliotto (La Pampa); Sergio Uñac (San Juan); Mariano Arcioni (Chubut); Alicia Kirchner (Santa Cruz); Gildo Insfrán (Formosa); Gerardo Zamora (Santiago del Estero); Raúl Jalil (Catamarca) y Osvaldo Jaldo (Tucumán), mientras que Jorge Capitanich (Chaco) lo hizo mediante Zoom.
Por la CGT estuvieron dos de sus secretarios generales, Héctor Daer y Carlos Acuña, como también Andrés Rodríguez, Armando Cavalieri, Gerardo Martínez, Jorge Sola y Juan Carlos Schmid. Llamó la atención que no hubo ningún emisario del presidente Alberto Fernández, quien también es el titular del Partido Justicialista.
“El peronismo no puede manejarse como una ‘orga’, como algo de elite”, abundó a la salida otro de los sindicalistas que, a diferencia de los gobernadores, se los notó con muchas más ganas de hablar. Por eso llegaron a pie. Los jefes provinciales, como acostumbran, lo hicieron en auto, directo por la cochera del CFI, sobre la calle Tres Sargentos.
La referencia del gremialista no admite equivocaciones: no es tanto Cristina Kirchner el escollo a sortear si no La Cámpora, la agrupación liderada por su hijo que es mala palabra para buena parte del peronismo. “Si ellos quieren venir, que vengan, pero como uno más. Hay que dejar de ser sectarios”, resaltó uno de los jefes sindicales. “A diferencia del 2019 y el 2021, queremos ser protagonistas”, ampliaron.
La puesta en escena del lunes fue, en ese sentido, atípica. No es común que los gobernadores y la mesa chica de la CGT hayan confluido en la sede del CFI, a pesar de que el encuentro se haya pautado antes de que Cristina Kirchner anunciara, un rato después de la condena a seis años de prisión y la inhabilitación perpetua al ejercicio de la función pública, su decisión prematura de no ser “candidata a nada” el año próximo.
Lo cierto es que la reunión es una muestra de la inquietud en el peronismo. Y de la preocupación por tener una estrategia y un candidato competitivos en el 2023 en medio de una crisis político y económica que alerta, y mucho. Con un plus: el liderazgo poco atractivo y deslucido de Alberto Fernández. Lo blanqueó Cavalieri antes de empezar la reunión, sin apelar a ningún eufemismo: “Lo de Alberto desde la pandemia para acá fue lamentable”.
En este nuevo polo de poder interno entienden que el espacio político debe abrirse y ejercer un debate amplio sobre las candidaturas, el programa de gobierno y lo que se le debe proponer a la sociedad de cara a las elecciones del 2023. No quieren quedar encerrados por la lógica del kirchnerismo al mando del poder. En definitiva, se trata de romper con la dinámica interna donde el sector K marca, muchas veces, el ritmo del peronismo.
Posibles presidenciables de las provincias
Antes de arrancar la reunión Ricardo Quintela aseguró que hay muchos mandatarios que pueden ser “precandidatos del justicialismo” debido a “la experiencia y la capacidad demostrada de gestionar una provincia”. Si bien evitó profundizar en el tema, dejó en claro que existe una voluntad de los gobernadores de que uno de los propio se convierta en candidato a presidente.
El presidente Alberto Fernández no se bajó de la posibilidad de la reelección, más allá de que los números no lo acompañan. El ministro de Economía, Sergio Massa, es el preferido de varios pero él insiste en que se comprometió con su familia en que no intentará serlo, por lo menos en el turno 2023.
El ministro del Interior, Wado De Pedro, es un nombre que La Cámpora juega para la pelea presidencial; y el gobernador chaqueño Jorge Milton Capitanich quiere también sumarse, luego de que en septiembre sean las elecciones de gobernador en Chaco.
Juan Manzur, el tucumano que irá por el cargo de vicegobernador de su provincia, aún se ilusiona con tener una chance nacional, más allá de su paso gris por la Jefatura de Gabinete de Nación.
El sanjuanino Sergio Uñac sonaba tiempo atrás como una posibilidad de entrar en la competencia nacional pero su perfil bajo no lo acompaña.
Y el gobernador bonaerense Axel Kicillof pretende ir por un turno más en la provincia mayor pero eso está en manos de Cristina Kirchner, su jefa política.